
Más de medio centenar de países han confirmado su intención de enviar efectivos militares a la Fuerza de Estabilización Internacional desplegada en la Franja de Gaza, como parte del esfuerzo diplomático y militar liderado por Estados Unidos para reforzar la seguridad en la región. Según informó la prensa estadounidense, el presidente Donald Trump señaló que la expansión de la coalición militar multinacional continuará mientras Washington solicita nuevos contingentes a gobiernos aliados, con el propósito de reducir los enfrentamientos armados y mejorar las condiciones para la población civil en Gaza. Trump declaró que “cada vez se sumarán más países. Ya están participando, pero enviarán el número de tropas que les he pedido que envíen. Quieren ver la paz”, en declaraciones recogidas por medios estadounidenses.
Al mismo tiempo, la administración estadounidense evalúa si el reciente ataque aéreo de Israel, donde falleció Raad Saad —figura prominente de las Brigadas Ezzeldin al Qassam, brazo armado de Hamás— junto con otros tres miembros del grupo, constituye una vulneración del alto el fuego implementado en la región desde el 10 de octubre. Durante un encuentro en el Despacho Oval, Trump declaró ante la prensa: “Tendremos que verlo. Lo estamos investigando”. Esta investigación busca determinar si la ofensiva israelí se ajustó a los términos del acuerdo de tregua, destinado a minimizar repuntes de violencia y sostener la calma relativa en Gaza, según detalló el medio estadounidense.
A pesar del escrutinio sobre la operación militar israelí y las interrogantes respecto al cumplimiento de la reciente pausa humanitaria, el medio consignó que Trump descartó un deterioro en la relación bilateral con el gobierno de Benjamin Netanyahu. El presidente aseguró que el vínculo de cooperación entre Washington y Tel Aviv permanece intacto, con canales de comunicación permanentes enfocados en la estabilidad regional y la observancia de los compromisos de cese al fuego. Trump agregó que la interlocución diplomática con Israel sigue operativa y explicó que esta coordinación resulta fundamental para abordar la seguridad en Oriente Próximo, de acuerdo con la información publicada por la prensa estadounidense.
Dentro de sus declaraciones, Trump se refirió también a la reciente operación militar estadounidense sobre instalaciones nucleares en Irán, la cual, según su versión, tuvo como objetivo eliminar la amenaza nuclear iraní y generar avances hacia la pacificación regional. “Mire, eliminamos a Irán. Destruimos el bombardero B-2. Eliminamos la amenaza nuclear iraní. Y gracias a eso, pudimos lograr la paz en Oriente Próximo. Ahora tenemos una muy buena relación con Israel”, sostuvo el presidente, en un testimonio recogido por el mismo medio. El ataque, según el reporte, fue ejecutado a comienzos de junio y estuvo dirigido contra infraestructuras clave de las capacidades nucleares iraníes.
Washington mantiene un monitoreo permanente sobre la evolución de los acontecimientos militares en Gaza, participando de consultas regulares con naciones aliadas para evaluar tanto el mantenimiento de la tregua como las condiciones de seguridad para la población civil, consignó el medio estadounidense. El despliegue de la fuerza multinacional responde a la estrategia de Estados Unidos de consolidar el cese de hostilidades e impedir una escalada armada, así como de fortalecer la protección de los civiles frente al riesgo de nuevos choques.
El gobierno estadounidense ha destacado la alianza militar con Israel y la cooperación de los diferentes Estados que integran la fuerza internacional como pilares para prevenir el resurgimiento de la violencia. El comunicado oficial resalta que la participación de cerca de sesenta países refleja el respaldo internacional a la estabilización y el control de la situación en Gaza, con vistas a promover una solución política negociada para la región, informó la prensa estadounidense.
Trump y sus asesores dan prioridad al mantenimiento del diálogo con las autoridades israelíes, a pesar de la investigación en curso por la muerte del dirigente de Hamás y otros integrantes de la organización. La intención declarada sigue siendo asegurar la vigencia de los acuerdos de tregua y fomentar gestos de confianza entre las partes involucradas, detalló el medio estadounidense. La diplomacia de Washington se mantiene activa en el seguimiento de los acontecimientos y en la coordinación técnica y militar con sus socios, centrando los esfuerzos en minimizar la violencia y avanzar hacia la estabilidad sostenible.
Los reportes de la prensa estadounidense reflejan que la Casa Blanca sigue evaluando la efectividad de la tregua y el impacto del despliegue multinacional, mientras analiza la sucesión de eventos en Gaza y busca implementar nuevas estrategias que contribuyan a una desescalada sostenible. Estos esfuerzos se articulan en torno al liderazgo estadounidense y a una política de alianzas internacionales, considerando que el apoyo externo resulta clave para limitar la intensidad de los enfrentamientos y sentar bases que faciliten negociaciones para el futuro de Oriente Próximo.
