La muerte de Rob Reiner todavía genera escalofríos en Hollywood. El director de Cuando Harry conoció a Sally (When Harry Met Sally) y su esposa Michele Singer Reiner fueron asesinados en su casa de Los Angeles el domingo 14 de diciembre y su hijo Nick es el principal sospechoso. El joven ingresó en reiteradas oportunidades a rehabilitación por abuso de sustancias y sus padres fueron su principal apoyo. El cineasta y su esposa supieron hablar públicamente de la lucha de su hijo y hace exactamente una década, la familia trabajó en un proyecto que les permitió llevar a la pantalla lo que les sucedía en la vida real.
La familia Reiner lleva días envuelta en una verdadera pesadilla. “Las palabras no alcanzan para describir el dolor inimaginable que sentimos a cada momento del día. La terrible y devastadora pérdida de nuestros padres es algo que nadie debería experimentar jamás. No eran solo nuestros padres; eran nuestros mejores amigos”, expresaron Jake y Romy Reiner en un comunicado que compartió la revista People. Fue la hija de la pareja la que encontró los cuerpos sin vida y llamó a las autoridades. Jamás pensó que su propio hermano podría ser el culpable.

Nick Reiner, de 32 años, está acusado de dos cargos de asesinato en primer grado realizados con un arma blanca. Según reveló Page Six, el joven ingresó a rehabilitación casi 20 veces y llegó a vivir en la indigencia. Además, tiene antecedentes de violencia y abuso de sustancias. Sus padres siempre lo acompañaron y de hecho ambos hablaron abiertamente sobre el amor que sentían por sus hijos.
El matrimonio afrontó la compleja situación de ver a su hijo Nick caer en el consumo de heroína y entrar y salir de rehabilitación constantemente. “Fue muy, muy difícil pasar por eso la primera vez, con esos altibajos dolorosos y difíciles”, sostuvo Rob Reinier en diálogo con Los Angeles Times en septiembre de 2015. “Y luego hacer la película lo sacó todo a la luz de nuevo”, agregó. Y es que ese año estrenó Being Charlie, producción que dirigió y que su hijo escribió junto a Matt Elisofon. El film, protagonizado por Nick Robinson y Cary Elwes, trata del hijo de un reconocido cineasta con aspiraciones de llegar a la política, que enfrenta un duro proceso de recuperación para salir de las drogas. La historia, sin duda, tocó fibras sensibles y Nick reconoció que no estaba del todo seguro de querer hacerla.
Durante la etapa promocional del film, Rob Reiner habló del impacto que tuvo la rehabilitación de su hijo en la familia. “El programa funciona para algunas personas, pero no puede funcionar para todos. Cuando Nick nos decía que no le estaba funcionando, no le hacíamos caso. Estábamos desesperados y, como tenían diplomas en la pared, les hacíamos caso a ellos cuando deberíamos haberle hecho caso a nuestro hijo”, reconoció. “Esta gente nos influyó muchísimo. Nos decían que era un mentiroso, que intentaba manipularnos. Y les creímos”, admitió su esposa.

Nick, que en ese momento tenía 22 años y estaba sobrio, afirmó que la posibilidad de hacer la película fue una de las cosas positivas que sacó de su etapa en rehabilitación: “Nunca pensé que sacaría provecho de la rehabilitación”. Y justamente reveló que el pensamiento que lo llevó a buscar alejarse de las sustancias estuvo íntimamente relacionado con su familia: “Me harté. Me harté de hacer eso… Vengo de una buena familia; se supone que no debería estar en la calle ni en refugios para personas sin hogar haciendo todas estas… cosas”.

El director admitió que más allá del resultado final de la película, lo más importante de todo fue la posibilidad que le dio de reconectar con su hijo. “Siendo sincero, para cuando llegamos al punto de hacer la película, ya no importaba si la hacíamos. Porque nuestra relación se había vuelto mucho más estrecha”, reflexionó.
Por otro lado, tras el asesinato de Reiner, Douglas Shaffer, productor ejecutivo de Being Charlie, le aseguró a NBC Los Angeles que la película no solo fue hecha para Nick, sino que fue “una carta de amor” de parte de su padre. “Quería conectar más con él, pero también quería ayudarlo en su carrera cinematográfica y, ya sabes, durante el proceso de creación de la película, quería comprender mejor por lo que Nick estaba pasando”, expresó. Incluso, recordó que el director llegó a describir la película como la mejor experiencia laboral de su vida.
