Santiago Abascal ha centrado su respuesta a la controversia sobre el “robo” de votos de Correos en Extremadura en recordarle a la dirigencia del Partido Popular actuaciones previas de su secretario general, Miguel Tellado, al que atribuyó haber “pedido que se robaran votos en los buzones y tirarlos a la basura” durante anteriores elecciones en Galicia. Según informó el medio que proporcionó la información, Abascal sostuvo que tales hechos deslegitiman al Partido Popular para exigir transparencia o limpieza electoral en el actual contexto de Extremadura.
De acuerdo con la información difundida, el líder de Vox señaló de forma explícita: “Es difícil que el PP tenga legitimidad a la hora de hablar de estas cosas (limpieza electoral), teniendo en cuenta que su secretario general practicó la guerra sucia contra Vox, pidiendo que se robaran los votos en los buzones y tirarlos a la basura”. Abascal subrayó que, desde su perspectiva, Vox es la única fuerza con fundamento para reclamar integridad en los comicios. Bajo este argumento, instó al Partido Popular a abstenerse de emitir denuncias sobre la limpieza electoral, insistiendo en que fueron sus propios dirigentes quienes “participaron en ataques a la limpieza electoral en Galicia”.
Al referirse a la situación concreta ocurrida en Extremadura, donde se reportó la sustracción de votos emitidos a través de Correos, Abascal remarcó que Vox continuará con sus exigencias de garantías en el proceso electoral. Insistió en la necesidad de que los militantes y simpatizantes de Vox, así como la ciudadanía en general, colaboren activamente con la vigilancia y el seguimiento del desarrollo electoral previsto para el próximo domingo en la región, anticipando además que mantendrá esta vigilancia en próximas citas electorales en todo el país.
El dirigente de Vox atribuyó al Gobierno central un clima de desconfianza y aludió a acusaciones de corrupción y de peligro para los intereses ciudadanos. “El Gobierno está acorralado por la corrupción y se convierte cada vez en más peligroso para los españoles”, enfatizó Abascal, según reportó la fuente. Asimismo, calificó de “muy grave” el hecho de que se sustrajeran votos destinados a los comicios en Extremadura. Destacó que, aunque el incidente haya podido relacionarse con un acto delictivo, ello no modifica la postura de desconfianza de su partido hacia el Ejecutivo nacional ni hacia el sistema electoral, al que atribuyó fuertes “vínculos con la corrupción” y acusó de amenazar la seguridad de las mujeres y el bienestar económico.
Sobre el caso específico de Extremadura, Abascal se mostró satisfecho de que más de un centenar de personas que resultaron afectadas por la sustracción podrán volver a sufragar por correo. No obstante, ligó el episodio a sus críticas habituales: “El hecho de que haya podido deberse el robo a un acto delictivo no empaña un ápice la desconfianza de Vox hacia un Gobierno mafioso, hacia un Gobierno corrupto, hacia un Gobierno que se ha convertido en un peligro para las mujeres en España y en una amenaza de ruina para todos los españoles, y ante un Gobierno que con Pedro Sánchez a la cabeza está dispuesto a cualquier cosa con tal de permanecer en el poder”, indicó el líder de Vox, citado por la fuente.
En otro tramo de sus declaraciones, recogidas por el medio, Abascal fue preguntado acerca de las afirmaciones de la candidata del Partido Popular, María Guardiola, respecto a un presunto ‘pucherazo’ electoral tras el robo de votos en Extremadura. El presidente de Vox opinó que Guardiola “se precipita siempre”, tanto en este caso como en la propia convocatoria de las elecciones, en las que, según Abascal, la aspirante popular buscaba obtener la Presidencia de la región sin establecer negociación alguna con Vox.
Santiago Abascal acusó a María Guardiola de haberse negado repetidas veces al diálogo acerca de cuestiones como las políticas favorables al sector agropecuario, la reindustrialización y la rebaja fiscal, iniciativas que, según el dirigente de Vox, ya se habían aprobado en la Comunidad Valenciana con la colaboración de su formación. Apuntó, además, que la candidata del PP también excluyó de la agenda regional las reformas orientadas a modificar las políticas de género vigentes en Valencia.
Vox ha ratificado, según reportó el medio original, su compromiso con la vigilancia y la denuncia de eventuales fraudes o irregularidades en los procesos electorales tanto en Extremadura como en el resto de España, enmarcando este objetivo en un discurso de crítica a la actuación tanto del Gobierno central como de parte de la oposición, a la que también cuestiona por actuaciones recientes.
