Después de que finalmente se anunciara el nuevo régimen cambiario, que implicará una banda de flotación entre $1000 y $1400 y que se irá actualizando mensualmente, la pregunta del millón es a cuánto abrirá el dólar oficial hoy, después de casi 6 años de limitaciones para la compra de divisas. Según los analistas, el valor se ubicaría entre $1200 y $1350, con la posibilidad de que abra más cerca del techo de la banda para luego acomodarse en la mitad.
Fernando Marull, de FMyA Economía y Finanzas, dijo en su informe semanal que las medidas son positivas y que hay un déjà vu de diciembre de 2015, cuando Mauricio Macri salió del cepo exitosamente con US$15.000 millones de ayuda, la brecha fue 0% y la inflación se aceleró solo transitoriamente. De acuerdo con esa situación, dijo que el dólar oficial debería abrir entre el dólar futuro de abril ($1200) y el cierre del contado con liquidación (CCL) del viernes ($1350). “Esperamos que abra bien arriba, más cerca del CCL, como pasó en diciembre de 2015, pero que luego vaya acomodándose más cerca de los $1200 del Rofex. El promedio del oficial y del CCL es $1250. No nos sorprendería ese número”, anticipó, y dijo que, a priori, se ve más oferta que demanda en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC).
A cuánto cotiza el dólar cripto hoy, a la espera de la apertura de los mercados
“La nueva oferta estará en los exportadores del agro y puede haber inversores que esperaban otro dólar para entrar vía MULC. La nueva demanda es más acotada: será de personas físicas más importadores, que ahora pueden pagar sus compras al contado o que pueden volver a acceder por única vez después de haber hecho CCL. Cabe recordar que los stocks encepados (US$15.000 millones entre dividendos más deudas viejas) no van a estar porque van a ir por Bopreal”, agregó.
Fernando Camusso, director de Rafaela Capital, también señaló que, teniendo en cuenta el cierre del dólar blend del viernes a $1130, debiera empezar a haber ventas a partir de $1200, $1250, que además es un promedio entre el oficial y el CCL. Por otro lado, sumó que es posible que el dólar pueda tener una sobrerreacción inicial, pero que después entrarán a jugar las tasas de interés. “No va a convenir guardarse los dólares a $1400 con el ajuste que tiene la banda del 1%. Entonces si se testea al techo de la banda va a convenir vender dólares. El famoso carry trade va a estar más vivo que nunca, si este esquema se ajusta realmente como en principio se piensa. De todas maneras, es difícil saber a ciencia cierta cómo arranca el mercado. Es complejo porque hace mucho que no operamos con un dólar prácticamente libre, donde se encuentran individuos, exportadores e importadores”, describió.
Por su parte, Andrés Reschini, de F2 Soluciones Financieras, dijo que va a ser un mercado con nuevos jugadores, porque las personas físicas ahora pueden participar, y que imagina a la oferta intentando obtener valores cercanos a la banda superior y a la demanda con más cautela. “Con una brecha superior al 20% y la llegada de la cosecha, no me extrañaría ver valores cercanos a $1300, aunque no descarto que, con el correr de las ruedas, pueda disminuir”, juzgó.
En tanto, Fernando Baer, de Quantum, dijo que el oficial no va a estar a valores muy lejos de los de ahora (el viernes el mayorista cerró a $1078), pero sí “encontrando un equilibrio más arriba”, y que hay que ver a dónde va la tasa en pesos.
Según Marull, hoy el Banco Central la tiene en 29%, pero la Lecap ya está pagando 40% de tasa nominal anual (TNA). “Imaginamos que el Central la puede subir un poco de 29% a 35% para dar una señal”, completó.
El impacto en la inflación
El correlato del movimiento del tipo de cambio oficial sería un reacomodamiento de los precios. De acuerdo con Marull, asumiendo que el dólar oficial termine en $1250 en abril y se dé un traslado acotado, la inflación de abril y mayo estaría en torno al 5% mensual y luego bajaría a menos del 2%, terminando 2025 en 35% anual.
En el mismo sentido, Camusso dijo que si el dólar oficial se estaciona en $1250 va a impactar en precios, aunque, con consistencia macro y superávit financiero, el pasaje a precios no debiera ser tan alto, sobre todo porque hay un ajuste de precios relativos importantes ya hecho. “Lo que pasó en educación, por ejemplo, es un ajuste estacional por única vez que tiró el índice bastante fuerte para arriba. Yo creo que puede llegar a 4 o 5% mensual, pero el proceso de desinflación debiera volver a desacelerar, si uno lo mide a través de cuáles son las variables que lo alimentan. Ahora, esto es si no hay una volatilidad fuerte, que puede existir inicialmente, y si el tipo de cambio oficial se va estacionando en los valores que uno cree de $1200, $1250, o incluso abajo. Si va a haber un testeo permanente del techo de la banda y el Banco Central tiene que estar vendiendo fuerte, que es un escenario al que yo le otorgo menos probabilidad, ahí creo que va a ser más duro”, detalló.
Por último, Baer dijo que hay que ver si los factores que moldearon marzo se repiten (por ejemplo, la suba de la carne), pero que, en principio, el pass through debería ser bajo si se mantiene la disciplina fiscal y se profundiza el signo contractivo de la política monetaria.