La Cámara de Casación rechazó un recurso de queja del exvicepresidente Amado Boudou en la causa que lo tiene procesado por una rendición de cuentas falseadas tras regresar de París en 2011, adonde había viajado en el marco de una reunión por el G-20, cuando él era ministro de Economía.
En febrero de este año, el Tribunal Oral Federal 8 rechazó un recurso de reposición que apuntaba a suprimir, de cara al juicio oral, una prueba con datos del hotel donde se alojó Boudou durante su estadía. El TOF lo rechazó y Boudou apeló ante la Casación.
La Sala II del tribunal, compuesta por Mariano Borinsky, Gustavo Hornos y Javier Carbajo, sostuvo que el recurso no se dirigía a una sentencia definitiva ni generaba un perjuicio irreparable y lo rechazó, con costas.
En esta causa, Boudou está acusado de haber defraudado a la administración pública mediante la presentación de declaraciones juradas con datos falsos y comprobantes de pago apócrifos. El exvicepresidente ya fue condenado por corrupción en la causa por la apropiación de la imprenta Ciccone.
Durante el proceso, las autoridades del hotel parisino desconocieron las facturas que presentó el economista y las declararon falsas. Explicaron que el número de cada una de ellas y las fechas de estadía no concordaban con la información registrada en el sistema informático de la compañía.
Puntualmente, se lo acusa de haber colocado a sabiendas datos falsos en cuatro expedientes del Ministerio de Economía. Esos montos fueron justificaron con comprobantes falsos presentados en la rendición de los gastos.
Según la acusación, las falsificaciones fueron a cuatro facturas del hotel BelAmi en París por 9395, 6943, 19.937 y 3863 euros. También por la falsificación de dos facturas de 3300 y 3050 euros para el pago de intérpretes.
Boudou fue procesado en 2017 y la causa elevada a juicio en 2019 por el juez federal Ariel Lijo. Se inició en 2013 a partir de una denuncia formulada por el abogado Alejandro Sánchez Kalbermatten.
Junto con Boudou serán juzgados Héctor “Cachi” Romano –ex secretario privado– y Guido Forcieri, quien era su jefe de Gabinete en el Ministerio de Economía