Mientras recorre un tramo del Camino de Santiago junto a su esposo, sus tres hijos y su madre, Colleen Crowley siente gratitud por el rumbo que tomó su vida. La psicóloga estadounidense se mudó desde California a España hace tres años y asegura que son “mucho más felices” allí. La decisión, que describe como “increíble y transformadora”, marcó un cambio radical para su familia.
Dejar Estados Unidos: un cambio planeado durante años
Crowley y su esposo habían soñado con residir en el extranjero una vez que tuvieran hijos, según confesó la propia mujer a CNN. “Vivir en distintas culturas y comunidades” era, para ellos, parte de su identidad.
Originaria de Colorado, vivió una década en Montecito, California, un enclave exclusivo del condado de Santa Bárbara. Aunque lo consideraba “un lugar maravilloso para criar una familia”, también era “quizás demasiado maravilloso” y limitado.
Ambos tenían carreras exigentes y tres hijos en distintas etapas de desarrollo, lo que dificultaba el cambio. La pandemia y el trabajo remoto facilitaron la mudanza. “Entre nuestras carreras y dónde estaban nuestros hijos… dijimos: ‘Creo que es hora de irnos’”, recordó.
Adiós California: ¿por qué eligieron España?
Atraída por las obras del escritor estadounidense Ernest Hemingway y por su ascendencia española, Crowley veía al país ibérico como el lugar ideal para combinar actividades al aire libre, como:
- surf
- esquí
- senderismo
La familia evaluó otras opciones, como Chile, pero España encajó mejor. Vendieron su casa, redujeron pertenencias y convencieron a la madre de Crowley para unirse a la aventura.
En julio de 2022 volaron a Barcelona y luego se trasladaron a Mallorca. La adaptación fue sencilla: “Realmente queríamos familia, naturaleza y una experiencia española”. Seis meses después, se mudaron a San Sebastián.
¿Cómo es la vida en San Sebastián?
“Supimos que habíamos encontrado el lugar después de dos días”, dijo Crowley. Allí, las rutinas incluyeron deportes para los niños, nuevas amistades y recorridos por la costa vasca. La cultura local, “conocida por ser bastante cerrada”, presentó retos, ya que las cuadrillas suelen ser muy unidas. Sin embargo, lograron formar lazos especiales.
La familia disfruta de actividades al aire libre, tales como:
- Tramos del Camino de Santiago.
- Surf en Francia.
- Excursiones a los Pirineos.
“Aquí es diferente. Es un aumento significativo en la calidad de vida”, señaló ella. La mayoría aprendió español y estudia euskera, aunque lo considera “realmente difícil de aprender”.
Una casa única y un estilo de vida distinto al de EE.UU.
Tras vivir en un apartamento, encontraron una de las pocas casas grandes del lugar, con vistas al mar y a la ciudad. “No hay muchas casas así en la zona, así que tuvimos suerte de encontrarla”, explicó.
En San Sebastián prefieren moverse en bicicleta y usan poco el coche. “En Estados Unidos tienes dos autos. Siempre estás conduciendo y es horrible. Así que eso ha sido increíble”, comentó Crowley.
Sin embargo, el mayor cambio, dice ella, ha sido la visión del mundo de sus hijos. Ahora “viajan constantemente y tienen amigos en todo el mundo”. Para la mujer, observar ese desarrollo le provoca “una enorme satisfacción”.
Retos y adaptación cultural de dejar EE.UU. y vivir en España
La burocracia española es una de las mayores diferencias. En tono de broma, la llaman “ser españolados” por la lentitud de los trámites. “Si tienes suerte, te responden en dos semanas”, comentó.
También se adaptaron a la siesta, que hace que algunos negocios cierren por la tarde. «Siempre me toma por sorpresa. Trabajo por la mañana, hago todo mi papeleo. Y luego estoy lista para hacer mandados a las 13.30 hs. Cuando llego, por supuesto, están cerrados», dijo Crowley.
La estadounidense resume el cambio como una oportunidad para ampliar horizontes y vivir con mayor equilibrio. «Hay más balance y menos pánico», afirma, convencida de que dejar California, aunque era un lugar cómodo, fue el paso necesario para transformar sus vidas.