Más de un centenar de empleados afectados por el expediente de regulación de empleo (ERE) podrán incorporarse a otras empresas del grupo Amazon, mientras que quienes opten por finalizar su relación laboral accederán a una compensación económica superior a la habitual y contarán con un plazo ampliado para buscar alternativas dentro de la compañía. A partir de este enfoque, la cifra de despidos que inicialmente se había fijado en 978 disminuye hasta 791, según detalló CC.OO. de Catalunya en un comunicado al que accedieron diversos medios.
Según informó CC.OO. de Catalunya, el acuerdo alcanzado contempla no solo la recolocación de trabajadores en otras filiales, sino también el carácter voluntario de las desvinculaciones, así como la protección prioritaria para aquellos colectivos considerados especialmente vulnerables por la legislación. Los miembros de la mesa de negociación del ERE, compuesta por trece representantes laborales —diez de ellos de CC.OO.—, establecieron en sus conversaciones un mecanismo para atenuar el impacto del ajuste: la indemnización alcanzará 38 días por cada año de servicio prestado, con el límite de 24 mensualidades. Además, cada persona recibirá como mínimo 7.000 euros, y quienes opten por el ERE disfrutarán de un permiso retribuido hasta el 28 de febrero. Este permiso permitirá el acceso al pago de acciones de la compañía, según consignó el medio.
La decisión de reestructuración se inserta en el contexto global de una transformación en Amazon, que anunció en octubre la eliminación de aproximadamente 14.000 puestos de trabajo en todo el mundo dentro de áreas administrativas y de oficina. Según publicó la fuente, la directriz se transmitió a nivel mundial por la vicepresidenta sénior de Experiencia de Personas y Tecnología en Amazon, Beth Galetti. En España, la compañía había previsto inicialmente el despido de 1.200 trabajadores, aunque tras la negociación la cifra se ha situado en 791 en las oficinas de Barcelona.
El medio reportó que este ajuste de plantilla responde a un proceso amplio de automatización y digitalización de procesos internos, basado en la implementación de inteligencia artificial para optimizar los recursos empresariales y adaptarse a las demandas cambiantes del mercado. Amazon justificó la medida ante los empleados como una vía para mantener una organización ágil, reducir las trabas burocráticas y desplegar los recursos hacia proyectos estratégicos considerados claves para el futuro de la empresa.
Respecto a los mecanismos de apoyo para los trabajadores, CC.OO. de Catalunya destacó que los empleados afectados dispondrán de 90 días para solicitar un nuevo puesto dentro de Amazon, contando con prioridad sobre otras candidaturas internas. Además, la empresa ha remarcado su compromiso de prestar ayuda adicional a los afectados por el plan, tanto para facilitar recolocaciones como para permitir la continuidad laboral de quienes pertenecen a grupos especialmente protegidos por la normativa vigente.
La reducción de plantilla en Barcelona se anunció tras la presentación de los resultados financieros del tercer trimestre por parte de Amazon. Según reportó CC.OO. de Catalunya, la empresa obtuvo en ese periodo un beneficio neto de 21.187 millones de dólares (18.213 millones de euros), lo que supone un crecimiento del 38,2% frente al dato del año anterior. El volumen de negocio del trimestre se elevó hasta los 180.169 millones de dólares (154.879 millones de euros), marcando un incremento interanual del 13,4%. Las ventas de productos alcanzaron 74.058 millones de dólares (63.663 millones de euros), un 9,6% más que en el ejercicio precedente, mientras que la comercialización de servicios sumó 106.111 millones de dólares (91.216 millones de euros), reflejando un ascenso del 16,3%.
El medio consignó que este proceso de ajuste afecta a cerca de 350.000 personas de un total aproximado de 1,5 millones que integran la plantilla global de Amazon. Los empleados que desempeñan labores administrativas y de oficina constituyen la mayoría entre los afectados, como resultado de las nuevas prioridades fijadas por la compañía en su estructura organizativa interna. Amazon ha reiterado que su objetivo con estos cambios es asegurar la capacidad de inversión en innovación y tecnologías emergentes, ajustando su modelo ante un entorno de transformación tecnológica con efectos inmediatos en el mercado laboral.
Durante la negociación del ERE, uno de los elementos más destacados para CC.OO. fue la introducción de mecanismos de protección para los colectivos especialmente amparados por la ley, lo cual garantiza que la reestructuración respete los derechos de los trabajadores en situaciones de mayor vulnerabilidad. Esta medida se suma a la voluntariedad de las desvinculaciones, que evita despidos forzosos entre quienes opten por permanecer en la plantilla, según subrayó el sindicato y reportaron los distintos medios que accedieron al acuerdo.
La compañía, según publicó la fuente, sostiene que estas iniciativas son imprescindibles para sostener su posición de liderazgo y la capacidad de responder con rapidez a los retos derivados de la innovación digital y las cambiantes preferencias de los consumidores. La aceleración de la automatización y la inteligencia artificial son, según la directiva de Amazon, elementos fundamentales del proceso de reestructuración con impacto tanto en el desempeño corporativo como en la configuración del empleo.
