Después de años de construir una vida en Estados Unidos, una ciudadana estadounidense-mexicana se enfrenta a una difícil decisión debido a la situación migratoria de su esposo cubano. A pesar de los esfuerzos realizados para regularizar su estatus, la amenaza de deportación hizo insostenible su permanencia en ese país. Ante esta realidad, la pareja optó por buscar una alternativa migratoria desde el extranjero.
La historia de una mexicana y su esposo cubano con orden I-220A
- La joven compartió un video en su cuenta de Tiktok, donde relató que lleva ocho años en EE.UU., país en el que concluyó sus estudios y obtuvo su licenciatura.
- Su esposo Jaziel, por su parte, salió de Cuba en 2022. Al llegar al territorio estadounidense, se entregó a las autoridades migratorias, que lo liberaron con una orden I-220A: “Eso hizo mi proceso migratorio muy difícil, prácticamente imposible”, afirmó el joven.
Este documento, conocido oficialmente como Orden de liberación bajo palabra (OREC, por sus siglas en inglés), es emitido por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés).
La orden permite a ciertos individuos permanecer fuera de un centro de detención mientras esperan una resolución de su caso migratorio, bajo la condición de cumplir con requisitos específicos, según detalla el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (Uscis, por sus siglas en inglés).
Cómo enfrentan la deportación y obstáculos legales
La joven explicó que, desde el inicio, intentaron regularizar la situación migratoria de su esposo a través de la Ley de Ajuste Cubano, pero el trámite no prosperó. Ambos invirtieron dinero en procesos que no dieron resultados y, finalmente, Jaziel fue incluido en un procedimiento de deportación.

“Ser deportado a Cuba para mí no es una opción, no estoy dispuesto a volver a vivir las cosas que yo sufrí durante 22 años. Yo aguanté desnutrición, anemia, falta de oportunidades, persecución política. Me llegaron a arrestar tres veces y en una de esas tenía 15 años, me desaparecieron de mi familia, me pusieron en una cárcel de adultos. Todo esto por ser hijo de una opositora importante de mi país”, detalló Jaziel.
La decisión que tomaron la mexicana y su esposo cubano
Como alternativa, la pareja decidió trasladarse a México. “No quiero que nos veamos en la situación que tengamos que separarnos, no quiero vivir con la angustia todo el tiempo sin saber cómo está mi esposo en Cuba, de temer si va a ser arrestado o maltratado y de la incertidumbre de cuándo lo voy a volver a ver. Así que como no estamos dispuestos a que Jaziel tenga una orden de deportación, hemos tenido que tomar una decisión sumamente difícil para los dos, porque nosotros hemos construido una vida entera aquí“, afirmó Sol.
La joven señaló que lo más importante es acompañar a su esposo y permanecer a su lado. También destacó que, como ciudadana estadounidense, mantiene un fuerte compromiso con el apoyo a los inmigrantes. “Vamos a buscar otra vía migratoria, pero estando fuera del país”, señaló.
