“Me vas a hacer atragantar con tamaña pregunta”, dijo el portavoz Manuel Adorni, mientras tomaba agua y pensaba qué responder ante una consulta que lo incomodó. La periodista Silvia Mercado le preguntó por qué, en su segunda conferencia consecutiva en la Casa Rosada, había llevado a cabo un “anuncio de campaña” en plena recta final de la crucial campaña porteña. Unos minutos antes, con el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, sentado sin hablar en primera fila de la sala de conferencias, el vocero presidencial había anunciado la baja a cero de los aranceles para los celulares importados.
Al igual que en el mediodía del lunes, el portavoz presidencial dio una conferencia en la Casa Rosada, una actividad que comenzó siendo diaria, en el inicio de la gestión de Milei, y que el vocero venía espaciando hasta que comenzó mayo. Desde entonces, en solo 13 días, dio cuatro conferencias, contra dos en abril (pasaron 27 días entre la primera, el 3 de ese mes, y la segunda, el 30).
Según publicó Perfil días atrás, el ritmo de las conferencias de prensa venía aminorando. Durante el primer cuatrimestre del año, el portavoz enfrentó micrófonos y cámaras en 14 conferencias, muy lejos de las 72 del primer cuatrimestre, pero de 2024.
Los tiempos electorales parecen dictar otra realidad. Desde Balcarce 50 adelantaron que habrá conferencias y anuncios en los tres días que vienen, para completar con asistencia completa la semana previa a la elección de 30 legisladores porteños, el domingo que viene. Mañana, según las previsiones del Gobierno, habrá “satisfacción” si el índice de inflación de abril queda por debajo de 3 por ciento. Y un “anuncio picante” el jueves más una “bomba” de índole económica, de la cual evitaron dar más detalles.
Con el anuncio de la salida a la luz del proyecto de reforma migratoria finalizaría una semana plena de anuncios, respuestas y presencia mediática, en coincidencia con una cita electoral clave en la que el Gobierno espera derrotar al Pro de Mauricio y Jorge Macri en su histórico y principal bastión.
Incómodo por la consulta periodística, el portavoz presidencial y cabeza de lista de La Libertad Avanza en la ciudad de Buenos Aires, dio sus explicaciones. “Es una pregunta alejada de la realidad, claramente no (es un anuncio de campaña)”, respondió el portavoz. Y recordó haber pedido, desde el día en que se conoció su postulación a legislador porteño, que “no mezclemos esta sala con mi actividad partidaria o electoral”. Agregó: “Si ustedes pretenden que yo, de acá en más, no trabaje más y no venga a Casa Rosada a hacer mi trabajo, eso no va a pasar”.
Y desafió a los periodistas acreditados, a quienes calificó de “raros”, ya que “si no hago conferencias, me reclaman conferencias, si hago conferencias me dicen que hago muchas y que tiene algún tipo de malicia detrás”. Irónico, propuso “votar cuántas conferencias no les llamarían la atención como para que nadie más tenga dudas de nada”.
La presencia de Caputo, que se mantuvo sonriente y silencioso durante la conferencia y se fue sin hablar junto al secretario de Producción, Pablo Lavigne, se suma al acompañamiento que Adorni tuvo en actividades y actos de campaña. Ayer mismo, antes de su conferencia en Casa Rosada, se mostró junto a la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en el anuncio de la cesión a Estados Unidos de la lista de barrabravas argentinos con antecedentes delictivos, que no podrán ingresar al Mundial de Clubes, a realizarse el mes próximo en ese país.
El presidente Javier Milei y Bullrich lo acompañaron, por la noche, a un desfile en honor al modisto Roberto Piazza, en el que también dijo presente la conductora Mirtha Legrand, quien apoyó públicamente la candidatura de Adorni en la ciudad. “!Viva la Libertad Carajo!”, dijo Legrand cuando le dieron en micrófono, con Milei, Bullrich y Adorni aplaudiendo desde el palco que les habían asignaron.
“!Que bien Mirtha!”, festejó Adorni antes de la conferencia, en la que por obra y gracia de una pregunta inesperada debió responder por su súbito y renovado interés por los encuentros con la prensa acreditada en Balcarce 50.