MAR DEL PLATA.- Vía Manuel Adorni, su vocero, el presidente Javier Milei acercó a este 61° Coloquio de IDEA un mensaje que resalta su compromiso con las reformas laboral e impositiva anticipadas días atrás desde San Nicolás. El vocero resaltó que esta semana se vivieron “hechos de magnitud histórica” con el apoyo de Estados Unidos y compromisos de inversión en el país por más de 50.000 millones de dólares y, frente al desafío electoral del próximo 26, anticipó un Congreso con más legisladores propios y de “otros partidos con los que se puede dialogar de manera racional”.
Este compromiso de abrirse al encuentro de otras fuerzas políticas apareció como detalle destacado entre una enumeración de logros de gestión que destacó a distancia el mandatario nacional, recientemente arribado tras su encuentro de este martes en Washington con su par estadounidense, Donald Trump.
“El mundo se entusiasma con el rumbo de Argentina”, leyó Adorni ante un auditorio que, sobre el cierre de la jornada, tenía casi un millar de asistentes. “A medida que baje el riesgo argentino noticias como esta se van a multiplicar en todos los sectores de la economía”, señaló. Incluso se animó a usar una frase que remite al inicio de la gestión presidencial de Carlos Saúl Menem: dijo que el país está “a las puertas de una verdadera revolución productiva”.
Poco más de un cuarto de hora le llevó esta exposición, que fue seguida con atención, en silencio y sin aplausos, aun cuando fueron varios los anuncios presentados y también las palabras de aliento al sector privado.
Algunos ya eran bien conocidos. Se remarcó el acuerdo de YPF con la italiana Eni, que se presenta con un potencial de 30.000 millones de dólares de inversión y la creación de casi 50.000 puestos de trabajo directos e indirectos en cuatro años. “La inversión más grande de la historia”, remarcó. Sumó el anuncio de Open AI, con otros 20.000 millones y completó con los que llegarían al sector minero para completar un total de 80.000 millones de dólares. Habló de un “efecto dominó” que multiplicaría estos casos.
“Dan cuenta del potencial internacional que la vieja política pretende mantener enterrado porque viven del atraso y no del futuro”, afirmó en la primera de varias referencias a obstáculos y trabas que se señalaron a sectores de la oposición.
El mensaje ofició como un amplio y detallado repaso de estos casis dos años que lleva Milei al frente del Gobierno. Adorni lo leyó casi en simultáneo con una entrevista que el Presidente brindaba en estudios del canal televisivo A24. Aquí hizo hincapié en medidas que aportan “paz y orden” para el despliegue del sector privado y una especial referencia al equilibrio fiscal. “Es un punto innegociable”, se destacó.
Adorni, frente a los principales ejecutivos del país, auguró “gigantescas inversiones” y aseguró que “no es casualidad” ya que “el Gobierno se comprometió a poner el país en orden para que las empresas apuesten por la Argentina”.
Esta mitad de mandato, se remarcó, correspondió a “estabilizar el descalabro heredado: fiscal, monetario y cambiario”. El paso siguiente, anticipó, serían reformas para mejorar la competitividad de la economía argentina.
En tal sentido sumó valor a los anuncios presentados para implementar cambios en la política y la legislación laboral e impositiva que deberán tener tratamiento en el Congreso nacional. Anticipó que estarán allí esta semana para que se sometan los proyectos a debate.
“Necesitamos que las empresas quieran y puedan contratar“, fue el mensaje de Milei y reconoció que se necesitan cambios que eliminen trabas a aquellos que quieran emprender. Adorni se permitió un comentario al margen y recordó que emplear a un obrero “no debe significar adoptar”.
Objetivo del beneficio de una reforma laboral serían las pymes, como principales generadoras de empleo. Se plantea desde el Ejecutivo terminar con los actuales convenios colectivos de trabajo y avanzar hacia una negociación libre entre cámaras empresarias y sindicatos.
Menos trabas burocráticas, batalla contra la judicialización del conflicto laboral y contratos sin tope y en moneda que acuerden las partes son solo parte de las reformas presentadas.
En cuanto a lo impositivo, el mensaje de Milei, transmitido por Adorni, apuesta a una simplificación del sistema y eliminación de lo que se pueda sin impactar en el sistema recaudatorio. “Este es el primer Gobierno que quiere eliminar los impuestos”, dijo. También sumó la intención de generar incentivos para que la gente “quiera facturar y blanquee ingresos”.
“Queremos que las pymes puedan volverse grandes empresas y las grandes se coman el mundo”, dijo Adorni desde su rol de vocero y también hubo en el mensaje una alusión al título de “Juega Argentina” que domina este 61° Coloquio de IDEA.
“No podemos jugar el Mundial con las piernas atadas”, expresó, y consideró que el sector privado, al que aludió como “los jugadores”, debe estar al frente de este desafío. “Los que se animen a jugar van a ganar”, pronosticó, y se comprometió a “sacarles la mochila para que salgan a ganar”.
En el final del discurso hubo referencias a las elecciones que se realizarán en diez días y que tanto revuelo generaron en la reunión de Milei con Trump, donde el líder estadounidense pareció entender que el 26 se ponía en juego el mandato presidencial argentino.
“Vamos a encontrar un Congreso más reformista a partir del 10 de diciembre”, avisó, con confianza en lo que dirán las urnas. Y en ese sentido volvió a poner en escena la posibilidad de un acercamiento con otros sectores con los que alcanzó acuerdos en el inicio de la gestión y de los que había tomado distancia en los últimos tiempos.
Comprometió un trabajo en conjunto con legisladores de “otros partidos con los que se puede dialogar de manera racional”. A los opositores les cuestionó que “crean que con la danza de la lluvia se mejora la economía”.
El planteo hacia lo que viene lo resumió en un único camino para “salir del pantano de 100 años de malas decisiones”. “Los demás ya se intentaron”, dijo con la referencia a los malos resultados. Y se tomó unas últimas frases para pegarle a la oposición. “Solo vende desesperanza”, definió el vocero oficial y dijo que para aquellos “su último refugio es oponerse al cambio que estamos llevando adelante”.