MAR DEL PLATA.- Una lujosa casona en un barrio privado de zona sur de esta ciudad fue el objetivo principal de los allanamientos ordenados por la Justicia federal para capturar a cuatro imputados por explotación de casinos ilegales y lavado de dinero originado de esa actividad.
Dos de los acusados pudieron ser detenidos en el lugar y se pedirá a Interpol que busque y atrape a otros dos que, según surge de datos de la investigación, se encontrarían fuera del país.
“Operación Casino Rumencó” fue el nombre dado a este procedimiento que estuvo a cargo de personal de Policía Federal Argentina (PFA), con órdenes de allanamiento y detención libradas por el juez federal Santiago Inchausti.
La hipótesis de la pesquisa, confirmada a partir del avance logrado con pruebas acumuladas desde hace casi un año, apunta a una organización que recurría a denominadas “mulas financieras” que les permitían derivar sus ingresos a cuentas de otras personas a las que contrataban para evitar ser detectados por el enorme volumen de dinero que generaban y recirculaban.
El resultado de esta investigación, además de las primeras detenciones, se reflejó en el secuestro de nueve autos de alta gama, cuatro motocicletas, dos cuatriciclos, once computadoras, más de 30 teléfonos celulares, casi 175.000 dólares y otra importante suma de dinero en moneda nacional, pesos uruguayos, reales y guaraníes.
El personal del Departamento de Operaciones contra Lavado de Activos y Financiamiento del Narcotráfico y de la División Antidrogas Mar del Plata, dependiente de la Superintendencia de Investigaciones contra el Narcotráfico, participó del procedimiento.
Si bien se ordenaron diez allanamientos en total, el principal objetivo, y donde tuvo sus principales logros el equipo de investigadores, fue una casona en el sector Ceibos, que es parte del barrio privado Rumencó, pionero en este tipo de desarrollos inmobiliarios en este distrito.
En uno de los puntos allanados, según trascendió, se identificó a un jefe policial de la provincia de Buenos Aires de muy alto rango dentro de la institución que es padre de uno de los imputados, sobre el cual pesaba un pedido de detención.
Las identidades de los imputados se mantienen por el momento bajo estricta reserva. Los dos que por el momento permanecen prófugos estarían entre Uruguay y Paraguay, de acuerdo datos logrados por los investigadores.
Uno de los detenidos tiene 24 años y el otro 58, en tanto –más allá de los otros dos pedidos de captura vigentes- se abrió investigación sobre una joven, también de 24 años.
Fuentes del caso informaron a LA NACION que la estructura de esta organización tenía como principal actividad el funcionamiento de casinos ilegales con los que obtenían millonarias ganancias.
Esos ingresos los canalizaban mediante una suerte de «brazo financiero« que lograba ingresar esos dineros dentro del circuito comercial y bancario mediante la participación de múltiples personas y cuentas individuales.
La acusación en esta causa que tramita en el Juzgado de Garantías y Correccional del Departamento Judicial Mar del Plata y tiene participación de la fiscal federal Laura Mazzaferri es por asociación ilícita, explotación de juego clandestino e infracción al Código Aduanero.
Un detalle aportado por los investigadores es que quienes oficiaban como “mulas financieras” eran personas de bajos recursos a las que, por sus servicios, compensaban con sumas de dinero exiguas en relación con los montos que les depositaban en sus cuentas, dinero que luego recuperaban en efectivo.
En la vivienda de Rumencó, de dos plantas y más de 1000 metros cuadrados, se secuestraron 174.460 dólares, 18.500 reales, 13.720 pesos uruguayos, 1.061.000 guaraníes y 2.817.600 pesos argentinos. Los otros inmuebles allanados también tienen el mismo perfil, de alta gama y en barrios privados.
