Alumni, actual campeón del Top 12 de la URBA, e Hindú, voraz acaparador de títulos en el nuevo siglo, quedaron lejos del objetivo trazado por cada club al principio de la temporada. Cumplidas las dos terceras partes de la fase regular, los resultados cosechados no han sido los esperados, la posición en la tabla resulta incómoda e infrecuente, tanto en Tortuguitas como en Don Torcuato. Incluso las expectativas creadas fueron insatisfechas. Pese a todo, el duelo, con aroma a clásico por cosas importantes, ilusionó a los jugadores y envalentonó a los hinchas. Sabedores, todos ellos, que a las 15.30 pasaba por la estación de la esperanza el último tren rumbo a la punta del campeonato. Por supuesto, que el simple hecho de que pase el tren, tomarlo y tener la certeza que va en la dirección deseada, no garantiza que llegue y deposite a sus pasajeros en el destino esperado.
Actualmente, el servicio circula con bastantes problemas y serias demoras, como para confiar en el arribo al lugar pretendido. Unos y otros también tenían claro que la formación del ramal Play-off pasaría llena y que apenas en el último vagón había sitio para un solo pasajero. Alumni e Hindú acumularon méritos y deméritos por igual para ganar la pulseada. Reinaron los nervios, dominó la tensión. Y el partido, inexorablemente, salió cerrado, áspero, intenso y de resolución emotiva, dramática. Los espectadores, los jugadores –titulares y suplentes– y los staff técnicos lo vivieron toda la tarde con los pelos de punta.
Y el último cuarto de hora se convirtió en un test-match. El local y el visitante, encararon cada acción como si les fuese la vida detrás de ella. No había lugar para la derrota, en ningún bando, los dos ya habían perdido demasiado en los tiempos precedentes. Sobre todo Alumni, que arrastraba seis caídas consecutivas. Entonces, el músculo mandó sobre el intelecto, el instinto se impuso al raciocinio, y el duelo se transformó en una moneda al aire. Una moneda al aire que esta vez cayó para el lado del campeón: 24-23, gracias a un penal convertido por Bautista Canzani cerca de la hora. Ajustado, angustioso, pero liberador triunfo de Alumni. Y reconfortante y esperanzador para el futuro inmediato. Para salir del clima derrotista y mirar con optimismo lo que resta del certamen.
Al término del partido, es un rito que los equipos formen una ronda y hablen algunos referentes, el capitán, el coach, quien tenga algo para decir. Alumni respetó el ritual y arengó Rodrigo Jiménez Salice, uno de los entrenadores. Tal vez el triunfo le sirva de poco a su equipo, es muy difícil que le alcance para prenderse en la pelea por los play-off. Sin embargo su alocución fue encendida y marcó claramente, por si hacía falta, que el prestigio de un equipo va más allá de los resultados circunstanciales, el año pasado muy positivos y este, algo negativos.
“La semana pasada no éramos los peores y ahora no somos los mejores. Siento un gran orgullo. Así juega la primera división de Alumni, peleando cada pelota como la última”, sintetizó. Minutos después, su capitán, Tomás Bivort le comentó a LA NACION: “La moneda no estaba cayendo para nuestro lado, pero por suerte esta vez se nos dio, en la última jugada, pero se nos dio. Estoy contento por eso, por el resultado. Pero más que nada por el equipo, que supo sobreponerse a los momentos difíciles; eso es lo que más orgullo me da. ¿Si el buen resultado se nos dio un poquito tarde? No sé. Depende, ¿tarde para qué? Creo que el proceso de esta temporada, tal vez no fue el que queríamos, con los resultados que queríamos, pero seguimos representando a Alumni. Y sigue siendo importante hacerlo así cada sábado que nos juntamos para ponernos la camiseta y entrar en la cancha. Todas las semanas tratamos de mejorar. Ahora ya está, ganamos y tenemos que pensar en el partido que viene, contra San Luis, de visitante”.
Compacto del éxito de Alumni
“La semana pasada no éramos los peores y ahora no somos los mejores. Siento un gran orgullo. Así juega la primera división de Alumni, peleando cada pelota como la última”, sintetizó. Minutos después, su capitán, Tomás Bivort le comentó a LA NACION: “La moneda no estaba cayendo para nuestro lado, pero por suerte esta vez se nos dio, en la última jugada, pero se nos dio. Estoy contento por eso, por el resultado. Pero más que nada por el equipo, que supo sobreponerse a los momentos difíciles; eso es lo que más orgullo me da. ¿Si el buen resultado se nos dio un poquito tarde? No sé. Depende, ¿tarde para qué? Creo que el proceso de esta temporada, tal vez no fue el que queríamos, con los resultados que queríamos, pero seguimos representando a Alumni. Y sigue siendo importante hacerlo así cada sábado que nos juntamos para ponernos la camiseta y entrar en la cancha. Todas las semanas tratamos de mejorar. Ahora ya está, ganamos y tenemos que pensar en el partido que viene, contra San Luis, de visitante”.
A la postre fue Hindú quien se quedó parado en el andén viendo como el tren partía con Alumni en el estribo. Justamente Hindú, que tantos trenes condujo hacia el podio. Esta vez no pudo. Este año se quedó en la vía. Contra Alumni tuvo pasajes de buen juego y algo de la contundencia que supo exhibir hasta no hace mucho tiempo. “Tenemos lagunas”, reconoció el eficaz apertura, Tito Díaz Bonilla. Y tal vez esa sea la clave del irregular funcionamiento. El recambio generacional (hay muy buenos valores sumando minutos en la primera) más la caída de algunos puntos en el nivel de ciertas individualidades, pueden completar la explicación del presente de Hindú.
Síntesis de Alumni 24 vs. Hindú 23
- Alumni: Tobías Wade; Ramón Fuentes, Santiago Pernas, Santiago González lglesias y Gonzalo Tapia; Bautista Canzani y Agustín Sánchez; Tobías Moyano, Santiago Montagner e Ignacio Cubilla A; Santiago Alduncín y Manuel Mora; Francisco Bottoni, Tomás Bivort (capitán) y Máximo Castrillo.
- Cambios: ST, 4 minutos, Alejo González Chaves por Fuentes, y 23, Juan Patricio Anderson por Cubilla y Tomás Passerotti por Sánchez.
- Entrenadores: Rodrigo Jiménez Salice y Hernán Ballatore.
- Hindú: Pascal Senillosa; Sebastián Cancelliere, Federico Graglia, Bautista Farise y Lisandro Rodríguez; Joaquín Díaz Bonilla y Lucas Fernández Miranda; Nicolás Amaya, Lautaro Bávaro (capitán) y Nicolás D’Amorim; Juan Comolli y Carlos Repetto; Nicolás Leiva, Lucas Cvitanovic y Rodrigo Palma.
- Cambios: ST, 26 minutos, Beltrán Álvarez por Fernández Miranda; 28, Juan Cruz Alanís por Leiva, y 30, Víctor Franco por Amaya, Joaquín López Nóbrega por Díaz Bonilla y Agustín Capurro por Cvitanovic.
- Entrenadores: Horacio Agulla, Francisco López Poch y Francisco Bosch.
- Primer tiempo: 20 minutos, gol de Canzani por try de González Iglesias (A); 31, gol de Díaz Bonilla por try de Rodríguez (H), y 33, penal de Díaz Bonilla (H). Amonestados: 33, Cubilla (A). Resultado parcial: Alumni 7 vs. Hindú 10.
- Segundo tiempo: 12 minutos, gol de Díaz Bonilla por try de Farise (H); 14, gol de Canzani por try de Pernas (A); 23, penal de Díaz Bonilla (H); 33, gol de Canzani por try de González Iglesias (A); 35, penal de Farise (H), y 37, penal de Canzani (A). Amonestados: 30, Cancelliere (H). Resultado parcial: Alumni 17 vs. Hindú 13.
- Árbitro: Simón Larrubia.
- Cancha: Alumni.
- Intermedia: Alumni 13 vs. Hindú 30.