Marbella se vistió anoche de nostalgia, energía y honestidad en el debut de Amaral en el escenario de Starlite Occident. Lo que prometía ser otro concierto más del dúo zaragozano se transformó en una auténtica celebración colectiva, un reencuentro entre generaciones y un recordatorio de por qué Eva Amaral y Juan Aguirre siguen siendo, casi tres décadas después, referentes imprescindibles en el pop-rock español. El público no solo coreó sus grandes clásicos; también abrazó sin reservas los temas de su nuevo trabajo, dejando claro que el grupo sigue sumando futuro sin perder ni un ápice de identidad.
Sobre el escenario, Eva y Juan desplegaron ese magnetismo único que los caracteriza desde sus inicios en pequeños locales en los años noventa. Canciones que han formado parte de la vida emocional de miles de personas se mezclaron con nuevas composiciones repletas de fuerza y sensibilidad. El repertorio conectó clásicos con material reciente en una noche donde la emoción fue creciendo hasta convertir el recinto en una auténtica fiesta de recuerdos y novedades. Uno de los momentos más vibrantes llegó con «En el centro de un tornado», y la imagen de la cantante volando sobre el escenario ya es un símbolo de esta gira.
La cita reunió a un público entregado y variado, con rostros conocidos como Irene Villa, Cayetana Guillén Cuervo, Valeria Mazza y Zayra Gutiérrez entre los asistentes, todos ellos disfrutando de la música y la posterior fiesta GUEST. Entre ellos también estuvo Paula Echevarría, que celebró su 48 cumpleaños junto a Miguel Torres, su hija Daniella y amigos como Fernando Sanz, Ingrid Asensio, Ana Antic y Raúl Peña, poniendo el broche dorado a una velada en la que Marbella vibró al ritmo de Amaral y confirmó, una vez más, que sus canciones siguen siendo refugio y estandarte de toda una generación.