El programa de Ana Rosa cierra este viernes su vigésima temporada en Telecinco. Tras un año y medio fuera de la parrilla matinal, el espacio retomaba su emisión el pasado febrero con el regreso de Ana Rosa Quintana a las mañanas de la cadena, una franja que la presentadora considera su “lugar natural”.
Ahora que cierra el curso televisivo, la periodista ha hecho balance de estos meses en su histórico formato, asegurando estar “muy contenta” de haber logrado una media del 14% de cuota y liderar su franja de emisión frente a una “competencia estupenda”.
“Mi sitio natural es la mañana. Mi cadena me necesitó un tiempo en la tarde y luego me dijeron ‘oye, lo que tú quieras’ y dije ‘pues volver a la mañana’”, confiesa a Infobae España.
La comunicadora insiste en que su salto a las tardes fue una decisión de la empresa y deja entrever que aceptó el encargo pese a no querer marcharse de las mañanas: “Eso fue algo que me pidió la cadena. Yo puedo no contestar, pero nunca miento”, asevera. Pese a tratarse de una tarea temporal, Quintana asegura que entendió la importancia de aquel paso: “Siempre lo he contado, me lo pidió la cadena y entendí que en ese momento necesitaban eso. Al cabo del tiempo me preguntaron qué prefería y dije ‘a mí me gustaría volver a la mañana con toda la información que está habiendo’”.
El paso por las tardes y la relación con ‘Sálvame’
Al asumir la franja vespertina, la presentadora tuvo que afrontar la sustitución de un formato emblemático como Sálvame, lo que llevó a que parte de la audiencia y los propios protagonistas del programa la señalaran como responsable de su desaparición: “¿Qué quieres que te diga? Que cada uno diga lo que le dé la gana. Yo sé muy bien cómo son las cosas”, responde con firmeza.
Durante ese periodo, su relación con Jorge Javier Vázquez y otros rostros vinculados a Sálvame fue objeto de especial atención. De hecho, con el de Badalona tuvo altibajos que ninguno de los dos ocultó: “Jorge para mí no es el de Sálvame, es el Jorge que empezó a hacer televisión conmigo”, apunta.
Quintana reconoce que su vínculo con el catalán ha atravesado distintas fases: “Hemos tenido una relación unas veces más cercana, otras más distante, a veces se ha cabreado conmigo y yo con él. Lo que son unos amigos”. Pero esa situación no es igual con el resto de miembros de Sálvame: “Con los demás no he vuelto a tener relación”, reconoce.
Coyuntura política y actualidad informativa
El momento político actual resulta especialmente estimulante para Ana Rosa Quintana, quien no oculta su entusiasmo al ser preguntada por la situación: “Estoy apasionada. Los periodistas queremos que haya noticia y ahora no nos faltan, ni políticas, ni de trenes, ni de apagones, ni de nada”.
Esa pasión hace que la presentadora esté dispuesta a volver de sus vacaciones en cualquier momento si surge una última hora relevante. “Soy una enferma de la información y siempre estoy mirando lo que pasa”, confiesa.
Sobre sus planes para este verano, Ana Rosa cuenta que solo tiene previsto “descansar, dormir, hacer cosas que tengo pendientes y luego ya pensar qué hago”.
A sus 69 años y a falta de un año para renovar su contrato de larga duración con Mediaset, Ana Rosa Quintana no muestra ninguna intención de jubilarse: “Soy muy joven para retirarme. Estoy muy contenta con lo que hago. El día que no lo esté, me voy, pero no por retirarme. Siempre me he ido cuando no he estado contenta”, asevera.
Por último, al ser consultada por su deseo de cara a septiembre, la presentadora responde con una sonrisa: “¿Un deseo para septiembre? Ya os lo imagináis”.