El encarecimiento de productos básicos en Estados Unidos tendrá consecuencias visibles desde julio. En específico, compañías como Procter & Gamble (P&G)y PepsiCo ya informaron que ajustarán sus precios por los aranceles impuestos por Donald Trump y por el aumento en los costos operativos, mientras que otras empresas enfrentan escenarios similares.
Procter & Gamble aumentará sus precios en julio por los aranceles de Trump
El director financiero de P&G, Andre Schulten, confirmó que los aumentos de precios llegarán a partir de julio, de acuerdo a Los Angeles Times. En una llamada con periodistas, afirmó que la compañía analiza cómo mitigar el impacto de los aranceles mediante ajustes en las formulaciones y fuentes de abastecimiento. Sin embargo, advirtió que los valores subirán.
En este contexto, P&G enfrenta una baja en las ventas en Estados Unidos y Europa Occidental. La empresa atribuye el descenso al menor gasto de los consumidores, una tendencia que responde tanto a la presión inflacionaria como a la incertidumbre económica.
La caída del consumo impacta en las ganancias de PepsiCo
PepsiCo modificó su previsión anual por el aumento de los costos. La empresa indicó que ahora espera ganancias iguales a las del año anterior, cuando antes proyectaba un crecimiento de entre 5% y 9%. El encarecimiento del aluminio, que tiene un arancel del 25%, presionó sus márgenes.
El CEO de PepsiCo reconoció una caída en el gasto de los consumidores. A su vez, la compañía advirtió que espera una fuerte volatilidad para el resto del año, mientras que los ajustes ya se reflejan en sus líneas de bebidas y snacks.
Los aranceles de Trump también afectan al sector farmacéutico
Los medidas económicas de Trump también impactan en la industria farmacéutica. Sin ir más lejos, el grupo multinacional Merck informó que los aranceles ya vigentes costarán cerca de 200 millones de dólares. Aunque mantuvo su previsión de ingresos, la empresa redujo su expectativa de ganancias para el año.
Es que la mitad de su facturación proviene del mercado estadounidense, mientras que el resto corresponde a operaciones globales. Sin embargo, la estructura internacional de Merck no alcanzó para amortiguar el golpe. La compañía anticipa que seguirá operando en un escenario cambiante, condicionado por decisiones comerciales bilaterales.
American Airlines teme un efecto colateral en el turismo
Por su parte, American Airlines retiró su pronóstico de ganancias para 2025. La compañía aérea explicó que la incertidumbre económica afecta la demanda. Aunque no enfrenta aranceles directos, el impacto sobre el poder adquisitivo modifica el comportamiento de los consumidores.
El turismo es una de las primeras áreas donde se reducen los gastos. American Airlines evalúa que muchos usuarios priorizarán necesidades básicas ante un aumento sostenido de precios. Los aranceles podrían desviar el gasto hacia alimentos y servicios esenciales.
La preocupación por la suba de precios gana consenso en la sociedad de EE.UU.
Una encuesta de AP-NORC reveló que seis de cada diez adultos en Estados Unidos están muy preocupados por el costo de los comestibles. La mitad también teme por los precios de bienes durables como autos o electrodomésticos. Estos datos muestran que el efecto ya se percibe en el consumo cotidiano.
Además, la incertidumbre sobre el empleo y las tasas hipotecarias profundiza el malestar. Según Schulten, los hogares enfrentan dudas sobre sus ingresos, sus planes de retiro y el valor de sus inversiones. Esa inseguridad influye en las decisiones de compra.
Algunos aranceles siguen vigentes, mientras otros fueron postergados para dar margen a negociaciones. Sin embargo, a pesar del pedido de tranquilidad de las autoridades, las empresas no logran prever con claridad cómo afectarán estos cambios sus costos y márgenes.