Lisboa, 27 ene (EFE).- La Asamblea Municipal de Lisboa decidió este lunes no debatir ni votar la nueva propuesta ciudadana para realizar un referéndum contra los pisos turísticos en la capital lusa, reformulado tras un bloqueo del Tribunal Constitucional (TC), al considerar que no se han corregido los «vicios identificados» por los jueces.
«Entiende la mesa de la Asamblea Municipal que no están sanados los vicios identificados por la decisión del Tribunal Constitucional, por lo que retira el punto de la orden de los trabajos del día», afirmó la presidenta del Parlamento municipal, Rosário Farmhouse, durante una reunión plenaria.
Si hubiera salido adelante, el documento habría sido derivado de nuevo al TC.
Al anunciar su decisión, activistas y varios partidos políticos criticaron a la mesa por no haber avisado antes.
La Asamblea decidió votar de nuevo, esta vez sobre si estaban de acuerdo con la retirada de este punto de la agenda, que recibió el apoyo del Partido Socialista, del Partido Social Demócrata (PSD, que gobierna en la ciudad y el país) y otras fuerzas de derecha, logrando la mayoría.
En contra votaron los partidos de izquierda Bloco de Esquerda, Livre, PEV, PCP, los animalistas de PAN y dos diputadas no inscritas.
La iniciativa ciudadana, liderada por el Movimiento Referéndum por la Vivienda, planteaba realizar dos preguntas a los ciudadanos sobre si están de acuerdo con que el Ayuntamiento de Lisboa ordene la cancelación de los pisos turísticos (conocidos en Portugal como ‘alojamento local’) registrados en inmuebles residenciales y que tampoco se permitan nuevas licencias en edificios destinados a vivienda.
El Tribunal Constitucional de Portugal rechazó a comienzos de enero una primera versión de la iniciativa popular, aprobada previamente por la asamblea municipal, al entender que el marco legal no permite hacer consultas sobre este tema y que no se pudo validar el número mínimo de firmas necesarias.
Tamara González, integrante de la iniciativa y presente hoy en la votación, afirmó en declaraciones a EFE que esta decisión es «inesperada», ya que, aseguró, se habían encargado de «sanar los vicios» y todos los errores procesales que identificó el TC.
«Nos parece una falta de respeto increíble de cara al tiempo, al trabajo y a las personas, en general: hacernos venir hoy y decir que la retiran sin dar explicaciones», lamentó.
Consideró también que esta decisión responde a los intereses políticos de la derecha y del Partido Socialista, que en la anterior ocasión votó a favor y que esta vez lo hizo en contra.
«Claramente es una estrategia política, que es que el PS tiene vergüenza de reconocer publicamente su voto y va a cargar esa responsabilidad a la asamblea municipal cuando realmente la responsabilidad es de su partido», añadió.
Asimismo, anunció que van a convocar una asamblea ciudadana para el próximo 8 de febrero para decidir cómo proseguir. EFE