El martes 30 de septiembre de 2025 inició el tercer debate de la reforma a la Salud en la Comisión Séptima del Senado, luego de que en la sesión pasada se haya aplazado la discusión por falta de cuórum.
La propuesta retoma su curso en esta célula legislativa después de que, en abril de 2024, la mayoría de congresistas de oposición y sectores independientes respaldaron el archivo de la iniciativa presentada por el Gobierno de Gustavo Petro.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel
No obstante, a diferencia de la primera versión de esta iniciativa, se espera que en esta oportunidad haya una discusión a fondo del proyecto político, teniendo en cuenta que superó los dos primeros debates en la Cámara de Representantes.
Para la reforma a la Salud, fueron radicadas tres ponencias en total.
La primera fue positiva, radicada por la bancada del Gobierno (Pacto Histórico), la segunda fue negativa, promovida por los partidos de oposición (Centro Democrático) y la tercera es una ponencia alternativa, liderada por las senadoras Norma Hurtado (Partido de la U), Esperanza Andrade (Partido Conservador) Ana Paola Agudelo (Mira) y Lorena Ríos (Colombia Justa Libres).
Sin embargo, en la discusión del 30 de septiembre, todo inició con la propuesta de archivo, liderada por los senadores Alirio Barrera y Honorio Henríquez (Centro Democrático), y que recibió el respaldo del Partido Conservador, previo al debate en cuestión.
En su presentación, el congresista Alirio Barrera sostuvo que el proyecto presentado por el Gobierno Petro se asemeja a la iniciativa archivada en abril de 2024, y cuestionó la viabilidad financiera de la propuesta oficialista.
“Nos presentan una reforma que vale $109 billones, pero el presupuesto es de $76 billones. ¿De dónde va a salir más dinero? ¿Otra reforma tributaria para legalizar la reforma a la salud? (…) los apartes de esa reforma eran los mismos que ya se habían discutido y que conoció el país”, expresó el senador del Centro Democrático en su intervención.
En su intervención, el legislador de oposición también puso de relieve la situación financiera de las IPS (clínicas y hospitales), al señalar que existe “una gran deuda con las IPS, que suma alrededor de $24 billones”.
Barrera advirtió que la aprobación de la reforma respaldada por el gobierno podría agravar ese hueco fiscal, incrementando la presión sobre las finanzas públicas del sector.
Preocupaciones del sector
Posteriormente, la Comisión Séptima acordó decretar una sesión informal para escuchar a los invitados propuestos por el senador del Centro Democrático.
Esperanza Arias, representante de los usuarios de la EPS, fue la primera en exponer su perspectiva, solicitando a las autoridades considerar el impacto sobre los 50 millones de usuarios del sistema. Arias manifestó su inquietud por la situación de los pacientes de alto costo y describió la gravedad de la coyuntura: “Todos los días recibo más de 20 o 30 usuarios (…) Nunca habíamos tenido una crisis como la que estamos viviendo”, manifestó.
De otro lado, Juan Pablo Rueda Sánchez, presidente de EPS Sanitas, aprovechó la discusión para presentar hallazgos preliminares de una auditoría forense privada sobre la intervención de la Superintendencia de Salud, iniciada el 2 de abril de 2024 y posteriormente anulada por la Corte Constitucional.
Rueda informó que durante los 17 meses de intervención se produjo un deterioro patrimonial de $1,7 billones, cifra que representa la pérdida acumulada en ese periodo. El directivo explicó: “Por la insuficiencia de la UPC, la EPS Sanitas venía dando resultados negativos, pero durante estos 17 meses eso se aceleró cuatro veces más”, precisó.
Defensa de la iniciativa del Gobierno Petro
Por otra parte, la senadora Martha Peralta, coordinadora ponente de la reforma propuesta por el gobierno nacional y miembro del Pacto Histórico, rechazó los argumentos de la ponencia de archivo del Centro Democrático.
En su intervención, la congresista calificó la exposición de Alirio Barrera como basada en “suposiciones injustificadas, en mentiras y falacias para generar miedo”.
Así mismo, defendió la solidez técnica de la propuesta oficialista, asegurando que cuenta con un estudio presentado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y basado en la Organización Panamericana de la Salud (OPS), y enfatizó que la reforma contempla la participación del sector privado y desestimó la posibilidad de una estatización total. “Es imposible estatizar el sistema de salud”, afirmó.
Entre tanto, el senador Ferney Silva Idrobo, también del Pacto Histórico, respondió a las críticas sobre la supuesta similitud entre el nuevo proyecto y el anterior que fue rechazado en 2024, asegurando que la esencia de la reforma es transformar estructuralmente el sistema y eliminar las barreras de acceso que afectan a una parte significativa de la población.
Así van los votos para la Reforma a la Salud
Hasta el momento, la ponencia de archivo solo cuenta con cuatro votos, los cuales son de los congresistas Alirio Barrera y Honorio Henríquez (Centro Democrático), y de las senadoras Nadia Blel y Esperanza Andrade (Partido Conservador).
Frente a la ponencia positiva, la propuesta cuenta con el respaldo de cinco congresistas afines al Gobierno Petro, como Marta peralta, Ferney Silva y Wilson Arias (Pacto Histórico), Omar de Jesús Restrepo (Comunes) y Fabián Díaz (Alianza Verde).
Mientras que la propuesta alternativa, es respaldada por las senadoras Norma Hurtado (Partido de la U), Ana Paola Agudelo (Mira) y Lorena Ríos (Colombia Justa Libres).
Ante la falta de mayorías para avanzar en la reforma, el ministro del Interior, Armando Benedetti, acudió al recinto de la Comisión Séptima del Senado para intentar salvar la propuesta. “Vengo a hacer magia, a tratar de buscar puntos de acuerdo (…) estoy tratando de buscar acuerdos para salvar la reforma a la salud”, declaró el jefe de cartera a los medios de comunicación.