Amancio Ortega lleva diez años siendo el hombre más rico de España. Por lo menos en la lista de Forbes, la cual ha encabezado desde hace una década y en todas sus ediciones. Según la misma lista, también es la novena persona más rica de todo el mundo, con un patrimonio neto de más de 100 mil millones de euros a 1 de abril de 2025. Pontegadea, su holding empresarial (que reúne todas las sociedades de cartera propiedad del empresario) ganó, solo en 2022, un total de 2 mil millones de euros, un 30% más de los que facturó en 2021, tras invertir en el sector logístico y residencial. Pero además de ser emperador de lo textil, el apellido Ortega también lo es de lo inmobiliario.
De acuerdo con El Economista, el empresario dedica una parte sustancial de su actividad a la compra de edificios singulares en países de todo el mundo, como España, Londres, Estados Unidos, Corea, Francia y Canadá, entre otros. Algunos hacen las veces de locales de Inditex, pero otros, con perfil corporativo, los alquila al completo. Su hija Sandra, por su parte – la segunda persona más rica de España y la 344 del mundo con una fortuna estimada de 6.900 millones de dólares – también tiene activos inmobiliarios y hace negocio en el mercado de los hoteles. Sandra Ortega ha conseguido su patrimonio mediante de sus inversiones en el sector turístico y hotelero, a través de la sociedad Rosp Corunna con su área inmobiliaria, que alcanzó los 203 millones de euros en ingresos netos en 2022. Su eje inversor es el alquiler para otras empresas, principalmente hoteleras.
Estos modelos de inversión han llevado a ambos a convertirse en los ‘caseros’ de las empresas ‘big tech’ más grandes, como Facebook, Amazon o Apple – en el caso de Amancio – y de cadenas hoteleras como Barceló, Palladium, Crestline Hotels & Resorts, The Standard, NH Hoteles y Room Mate – en el de Sandra -, con lo que obtienen beneficios millonarios. El holding de Amancio, además, también se dedica a la inversión de alquiler a hoteles, sobre todo en Portugal: es el único país en el que Pontegadea cuenta con diez edificios que funcionan como hoteles, 8 de ellos alquilados a la cadena Accor, uno a NH, y el último a Iberostar. También cuenta con un par de centros comerciales en Lisboa. Sandra tiene sus propias inversiones en el país, pero en lugar de hoteles, se trata de un complejo turístico de 200 millones de euros, inversión que fue duramente criticada por los ecologistas portugueses.
Las propiedades inmobiliarias de Amancio Ortega
Según recoge El Mundo, en España su patrimonio se concentra en Madrid, con activos como Torre Picasso (de 157 metros de altura, comprada en 2011 por 400 millones de euros), Torre Cepsa (de 248 metros, adquirida en 2016 por 490 millones) y el edificio de Gran Vía 32, donde se encuentra el mayor Primark del país. En Barcelona, su foco está en el entorno del Paseo de Gràcia, con inmuebles que albergan firmas como Apple, Zara, Burberry y Santa Eulàlia. También posee edificios en Galicia, su tierra natal.
En Estados Unidos, ha invertido más de 3.600 millones de euros. En Seattle, destaca el complejo Troy Block, sede de Amazon (656 millones), y Arbor Blocks, vinculado a Meta (375 millones). También en esa ciudad adquirió el rascacielos Kiaria, con 461 viviendas de lujo (300 millones). En Miami, posee el Southeast Financial Center (470 millones) y el hotel Epic.
En Nueva York, Ortega cuenta con activos como 666 de la Quinta Avenida (240 millones), 19 Dutch (505 millones) y el histórico E.V. Haughwout Building (133 millones). En Chicago, sobresalen 730 North Michigan Avenue, con una tienda insignia de Tiffany (300 millones), y 727 West Madison Street, torre residencial de lujo adquirida por 213 millones. En Canadá, controla cuatro edificios, incluyendo el Royal Bank Plaza de Toronto, adquirido en 2022 por 800 millones.
En el Reino Unido, las inversiones superan los 4.450 millones de euros. En Londres, posee inmuebles en Oxford Street, como Lumina House (192 millones) y 12-32 Oxford Street (550 millones). También destacan propiedades como Devonshire House (500 millones), The Post Building (700 millones) y Adelphi Building (680 millones), con inquilinos como Spotify, McKinsey y Blackrock. En el resto de Europa, Ortega posee el Palacio Bocconi en Roma (130 millones), varios edificios en París, seis en Lisboa, y centros logísticos en Países Bajos. En Irlanda, adquirió por 225 millones el mayor centro logístico de Amazon. En Luxemburgo, compró en 2024 un edificio de 165 millones.
