El incidente del miércoles a la mañana fue el último suceso de falla de motores que impulsó a Aerolíneas Argentinas a suspender las operaciones de ocho aviones Boeing 737-800 para revisar las turbinas con el fabricante CFM.
Según pudo reconstruir LA NACION, a las 9.39 de ayer, el vuelo AR1526 se dirigía a la pista de Aeroparque Jorge Newbery para realizar la maniobra de despegue hacia la ciudad de Córdoba cuando, mientras levantaba vuelo, el 737-800 matrícula LV-FSK presentó una falla en el motor izquierdo y la turbina tuvo una explosión.
Un video que circuló en redes sociales y cuya veracidad fue confirmada por fuentes oficiales muestra al Boeing a toda velocidad en la pista para despegar. Cuando levantó vuelo, se generó una explosión en el motor izquierdo, lo que causó una escena de pánico entre los pasajeros.
A raíz de esto, la tripulación siguió los procedimientos de seguridad establecidos y dirigió la aeronave al Aeropuerto Internacional de Ezeiza, donde aterrizó de emergencia sin inconvenientes. Por el incidente, las autoridades aeroportuarias suspendieron temporalmente las operaciones tanto de despegue como de aterrizaje por algunas horas mientras se verificaba la pista y se controlaba que no hubieran quedado partes metálicas del motor.
De acuerdo con la empresa, “la aeronave presentó una falla en el motor número uno poco tiempo después de iniciar su despegue”. Se investiga el origen del desperfecto.
Desde Aerolíneas Argentinas confirmaron a este diario que se revisó la documentación interna y se verificó que el motor estaba en condiciones normales y tenía el mantenimiento adecuado. Además, el fabricante fue informado para que junto con el equipo técnico de la empresa se realice la inspección correspondiente y se pueda determinar el origen de la falla.
La suspensión
Ya con un antecedente idéntico durante un despegue en Trelew la semana pasada y con otras dos fallas de motores este año, tras una advertencia del gremio de los pilotos sobre un defecto en las turbinas CFM, el directorio de la empresa que conduce Fabián Lombardo decidió dejar en tierra a ocho B737-800 para que sean sometidos a una inspección.
Se trata de las aeronaves con las siguientes matrículas: LV-FQY; LV-FQZ; LV-FSK (involucrado en el incidente de ayer); LV-FUA; LV-FUB; LV-FUC; LV-FVM; LV-FVO.
Tal como publicó LA NACION, la aerolínea de bandera dijo en un comunicado que “el mantenimiento de todos los motores operados por Aerolíneas Argentinas tiene un cumplimiento absoluto en términos de las verificaciones indicadas por sus fabricantes” y que, en el caso particular de estos motores, el fabricante CFM recomienda una revisión al cumplirse los 17.200 ciclos (aterrizajes y despegues).
“Ninguno de los motores que registraron fallas estaba cerca de alcanzar ese umbral, por lo que se solicitó al fabricante una opinión técnica antes de reincorporar esos equipos al servicio. En paralelo, se requirió también la opinión técnica de otras aerolíneas de la región que operan aeronaves equipadas con esa motorización, que tuvieron sucesos similares. Las autoridades regulatorias locales fueron notificadas y se está trabajando en conjunto para fijar un criterio de resolución”, afirmaron.
La suspensión de la operación de los ocho aviones representa casi un 10% de la flota total de la empresa y casi un 30% de las 28 unidades del 737-800, modelo encargado de rutas nacionales y regionales. Los aviones que fueron retenidos tienen en promedio 10 años de antigüedad.