
Google activó desde el 18 de noviembre su modelo Gemini 3, la evolución más reciente de su sistema de inteligencia artificial, y lo hizo con un cambio significativo respecto a lanzamientos anteriores: el acceso completo está disponible para cualquier usuario, sin necesidad de suscripción.
Según la compañía, esta apertura permitirá que más personas utilicen de inmediato las mejoras en comprensión, razonamiento y generación de contenido que incorpora la nueva versión. Sin embargo, para comenzar a usar el modelo no basta con ingresar a la plataforma; requiere un ajuste manual que muchos usuarios podrían pasar por alto.
La configuración por defecto mantiene activo un modo denominado “Fast”, que continúa operando con la tecnología de Gemini 2.5. Para activar la nueva generación es necesario entrar al menú que aparece debajo del cuadro de texto y seleccionar la opción “Thinking”, que corresponde internamente a Gemini 3 Pro.

Este cambio es el que habilita todas las funciones avanzadas del modelo, incluidas las mejoras en el procesamiento de preguntas complejas y en la generación de respuestas con mayor profundidad analítica. La aclaración es importante porque algunos usuarios han reportado confusiones al creer que estaban usando la versión más reciente cuando, en realidad, seguían vinculados a la edición anterior.
Una de las novedades más destacadas de Gemini 3 es la capacidad de crear interfaces visuales generadas en tiempo real. Esta función, incluida dentro del Modo IA del buscador de Google, permite construir elementos interactivos a partir de una simple instrucción escrita.
Entre los ejemplos mostrados por la empresa figuran mapas personalizados, simulaciones de física básica, cuestionarios adaptados al nivel del usuario y paneles que se organizan automáticamente según la información solicitada. La compañía sostiene que estas herramientas buscan ofrecer una experiencia más dinámica que el formato basado exclusivamente en texto que caracterizaba a las versiones anteriores.
En paralelo, Google presentó una plataforma para desarrolladores llamada Antigravity. Este entorno está diseñado para agentes autónomos capaces de ejecutar tareas de programación de inicio a fin, sin intervención humana constante. Los agentes pueden acceder al editor, al terminal y al navegador para escribir código, realizar pruebas, corregir errores y ajustar módulos completos.
La empresa describió esta función como un paso hacia sistemas más independientes, capaces de manejar flujos de trabajo prolongados. No obstante, subrayó que su uso estará destinado inicialmente a equipos técnicos y que su rendimiento será evaluado de manera progresiva para evitar problemas de seguridad o inestabilidad.
El despliegue de Gemini 3 se está realizando por fases, lo que explica que algunos usuarios aún visualicen en el menú las referencias a “2.5 Flash” o “2.5 Pro”, en lugar de las nuevas denominaciones. Google indicó que la actualización llegará de forma paulatina a todas las cuentas en las próximas semanas.
A pesar de esta transición gradual, el corazón del sistema ya se encuentra disponible y sin restricciones de pago. Solo la función Deep Research mantiene su requerimiento de suscripción AI Pro, ya que se trata de una herramienta enfocada en investigaciones de largo alcance con múltiples iteraciones de razonamiento.
Los primeros resultados técnicos publicados por la compañía muestran avances en pruebas de razonamiento matemático. En la evaluación AIME 2025, Gemini 3 Pro obtuvo 95% de precisión, superando a Claude Sonnet 4.5, que alcanzó 87%, y ubicándose prácticamente al nivel de GPT 5.1, que registró 94%. Estas métricas buscan mostrar la capacidad del modelo para procesar problemas estructurados y análisis prolongados, una de las áreas donde los sistemas de IA suelen presentar mayores diferencias.
La decisión de Google de permitir el acceso libre a Gemini 3 marca un contraste con el lanzamiento de Gemini 2.5 Pro, que inicialmente estuvo limitado a usuarios de pago. Con este movimiento, la compañía apuesta por acelerar la adopción masiva y facilitar la comparación directa con sus principales competidores. Desde ahora, cualquier usuario puede evaluar si la nueva versión cumple con las promesas de mejoras sustanciales o si la brecha entre los grandes modelos de IA sigue siendo mínima en la práctica.