
La inteligencia artificial continúa transformando la creatividad digital con herramientas que abren nuevas posibilidades para el usuario común. En este panorama Google presentó una función avanzada en su aplicación Gemini que permite convertir imágenes estáticas en videos animados, con resultados personalizados y una interfaz sencilla.
Cómo son los videos generados por Gemini
La herramienta innovadora de Gemini se denomina Ingredients to Video y utiliza el modelo generativo Veo 3.1. Gracias a esta tecnología, los usuarios pueden seleccionar hasta tres fotografías como referencia, describir el tipo de escena que desean y añadir instrucciones de audio, como sonidos ambientales o diálogo.
En cuestión de segundos, la herramienta produce un clip animado de unos 8 segundos de duración y con calidad de 720p, sincronizando las imágenes, la narrativa y el sonido para crear una pieza audiovisual coherente.
Cómo convertir una foto en video con IA
El proceso está orientado a la simplicidad. Basta con abrir la app de Google Gemini, dirigirse a la sección de herramientas, seleccionar la opción “Video”, cargar las imágenes y detallar la acción o el ambiente a representar.
Posteriormente, es posible visualizar cómo el contenido visual estático cobra vida, con movimientos naturales y atmósferas que responden a la descripción del usuario.
El sistema genera automáticamente el audio solicitado, reproduciendo desde sonidos suaves del mar hasta conversaciones o efectos urbanos, según las indicaciones proporcionadas.

La adopción de inteligencia artificial como base para este tipo de funciones ha impulsado una explosión de creatividad en la comunidad de Gemini. De acuerdo con cifras recientes de Google, más de 40 millones de videos fueron generados en la plataforma durante las últimas siete semanas, utilizando tanto Gemini como la aplicación especializada Flow.
Qué se puede hacer con los videos generados por Gemini
Los usos y temáticas varían: desde reinterpretaciones modernas de cuentos clásicos y experimentos de ASMR hasta la animación de objetos cotidianos y escenarios de fantasía o naturaleza.
Esta flexibilidad convierte la herramienta en un recurso útil para creadores de contenido, docentes, artistas, estudiantes y cualquier persona que desee experimentar con video sin conocimientos técnicos previos.
Además de dar animación a ilustraciones, objetos o personas, la función es capaz de acercar conceptos visuales a proyectos educativos y de comunicación, extendiendo el alcance del video personalizado más allá del ocio.
Ética en los contenidos generados con IA por Google
El desarrollo de funciones generativas de Google también incluye compromisos de seguridad. La empresa ha subrayado en un comunicado que todos los videos creados a través de Gemini quedan marcados con una marca de agua visible y otra invisible, llamada SynthID, lo que permite identificar su origen y reduce el riesgo de desinformación.
Adicionalmente, se aplican políticas estrictas para evitar la producción de contenido inapropiado, junto a procesos de prueba y auditoría diseñados para anticipar y resolver potenciales problemas de uso indebido.
Desde la compañía extendieron una invitación a los usuarios a socializar su experiencia mediante los botones de “me gusta” y “no me gusta” disponibles en cada contenido generado, con el objetivo de realizar ajustes constantes en las medidas de seguridad y en la calidad de la aplicación.
Las nuevas opciones para crear videos animados comenzaron a desplegarse para usuarios con suscripciones a Google AI Plus, Pro y Ultra en determinados países. La transparencia es parte del proceso, ya que al generarse un video se indica de forma explícita el modelo utilizado, permitiendo a los usuarios conocer la tecnología detrás del resultado.
Más allá de la integración en Gemini, estas características también están disponibles en la herramienta Flow, pensada para la creación audiovisual con IA dentro del ecosistema de Google. De esta manera, la compañía continúa ampliando el acceso a la animación apoyada en inteligencia artificial, al tiempo que refuerza las medidas para un uso responsable y seguro de tecnologías generativas.
