Madrid, 20 jun (EFECOM).- La subgobernadora del Banco de España, Soledad Núñez, ha alertado de la reducción del valor que pueden sufrir propiedades ubicadas en zonas inundables, lo que puede acabar afectando a la industria bancaria y a los inversores institucionales.
Núñez, en su discurso este viernes en la clausura de una nueva edición de los ‘Viernes Verde’ que organiza el supervisor bancario, ha recordado que una parte significativa de los balances de las instituciones financieras españolas están relacionados con el sector inmobiliario.
Ello supone que están expuestos a riesgos climáticos físicos, por ejemplo en el caso de los inmuebles situados en zonas inundables, ha dicho la subgobernadora.
Ha explicado que las compañías de seguros están viendo aumentar el coste de los siniestros y estiman una reducción del valor de las propiedades en zonas vulnerables a determinados riesgos físicos, lo que puede acabar afectando a la industria bancaria y a los inversores institucionales.
Por eso, considera razonable que el sector financiero se involucre en la adaptación climática, contribuyendo a la concienciación de los clientes y desarrollando soluciones para financiar medidas de adaptación y la asegurabiidad de los riesgos climáticos.
También ha dicho que las políticas sobre adaptación al clima, el agua, el suelo, los riesgos de inundaciones o el aumento del nivel del mar deben ser transparentes, y se deben facilitar los datos y las herramientas necesarias para una buena gestión.
Ha afirmado que sólo así se puede ayudar a las empresas a hacer una estimación precisa de los riesgos relacionados con el clima, y los costes y beneficios de implementar sus propias medidas de adaptación.
En opinión de la subgobernadora, las instituciones financieras deben evaluar su exposición a los riesgos climáticos y tomar medidas preventivas para reducir su vulnerabilidad, además de ver cómo pueden ayudar a sus clientes a adoptar las medidas oportunas y reducir los riesgos derivados del cambio climático.
Núñez ha dicho que las instituciones financieras deberían promover instrumentos para apoyar la adaptación al cambio climático, como la incorporación de riesgos físicos en los requisitos de aceptación, la oferta de préstamos vinculados a la sostenibilidad y la creación de incentivos para la prevención.
Ha añadido que en aquellos casos en los que no se puedan tomar medidas preventivas o persista cierta vulnerabilidad tras su implementación, las instituciones podrían considerar estrategias de recuperación. EFECOM
