La batalla judicial entre la productora de la película de Blade Runner 2049 y Tesla, la empresa de Elon Musk de automóviles eléctricos, levanta temperatura en los tribunales estadounidenses.
Por un lado, un juez federal ha limitado el alcance de una demanda interpuesta por Alcon Entertainment, que acusa a la compañía automotriz de introducir imágenes de la película en un generador de inteligencia artificial para crear material promocional sin licencia, al estudio Warner Bros. Sin embargo, el tribunal determinó que Tesla podría haber infringido los derechos de autor en detrimento de la película protagonizada por Ryan Gosling.
El juez federal de distrito George Wu desestimó el lunes las acusaciones de violación de las marcas registradas de Alcon Entertainment, aunque permitió que procedieran algunas reclamaciones por derechos de autor, según informó el portal The Hollywood Reporter.
La colaboración de Tesla con Warner Bros. para promocionar su robotaxi en una deslumbrante presentación, realizada en un estudio el año pasado, dio origen a la demanda. En el estreno, Elon Musk subió al escenario en lo que él llamó un “cibertaxi” antes de mostrar la imagen de una figura masculina con una chaqueta que observaba las ruinas abandonadas de una ciudad bañada por una luz anaranjada y nebulosa. Alcon alegó que la imagen pretendía ser entendida como un fotograma real de la secuencia de Blade Runner 2049 en la que el personaje de Ryan Gosling explora unas ruinas dentro de lo que alguna vez fue la ciudad de Las Vegas.
Entre los interrogantes que plantea el caso se encuentra el hecho de que constituya o no infracción la creación de una imagen por parte de un generador de imágenes con IA, copiando parte de una obra protegida por derechos de autor. Tesla argumentó que la demanda no debía presentarse porque las alegaciones de Alcon se basan únicamente en creencias.
El lunes, el tribunal declaró que sería prematuro desestimar la demanda, y remarcó el intento de Tesla de obtener permiso para usar Blade Runner 2049 en su evento, el cual fue denegado apenas horas antes del inicio de la presentación, así como varias similitudes entre los materiales promocionales que Tesla utilizó y los fotogramas de la película que supuestamente fueron infringidos.
“Dado el ajustado plazo con el que trabajaban Musk y Tesla, a la luz de su solicitud de última hora —y la consiguiente denegación de última hora— para utilizar Blade Runner 2049, no es en absoluto improbable que el demandante alegue, basándose en información y creencia, que utilizaron un generador de imágenes de IA para crear el producto final”, escribió George Wu.
Si bien la mayoría de las demandas por derechos de autor contra Tesla fueron admitidas a trámite, las presentadas contra Warner fueron desestimadas, excepto una por infracción contributiva que acusa al estudio de inducir la presunta mala conducta. El tribunal coincidió con la empresa que no era responsable de supervisar el trabajo de Tesla en relación con la presentación. “No hay nada que indique que Warner tuviera una posición o función de supervisión o control respecto a Tesla y Musk”, declaró.
Por ahora, la batalla está en instancias de tecnicismos. Por un lado, Tesla y Warner Bros pueden considerar un round ganado ya que el tribunal desestimó la demanda por una presunta infracción de la Ley Lanham, una ley federal de marcas registradas que prohíbe la falsa asociación. Aunque Musk mencionó a Blade Runner durante su presentación, no engañó a los espectadores sobre la fuente de la película, según el fallo.
Wu también enfatizó que Tesla y Alcon no son competidores. “El demandante claramente no se dedica a ese negocio”. El tribunal dijo que probablemente permitiría a Alcon subsanar sus reclamaciones de derechos de autor, pero no las que alegan infracciones de la Ley Lanham, considerando que tales “enmiendas serían inútiles”.