Brad Pitt atraviesa uno de los momentos más tristes de su vida tras la muerte de su madre, Jane Etta Pitt, a los 84 años. La noticia, confirmada por allegados a la familia, ha afectado profundamente tanto al intérprete como a sus hermanos, que siempre han mantenido una estrecha relación con ella.
Orientadora educativa de profesión, Jane fue un apoyo constante en la vida personal y profesional de sus hijos. Discreta pero presente en los momentos más importantes, supo estar cerca sin buscar el foco mediático. Hace solo unas semanas, se vio reflejado el cariño entre madre e hijo cuando el protagonista de «Seven» le dedicó un sentido «Te quiero, mamá» durante una entrevista en televisión, un gesto espontáneo que ahora cobra aún más valor.
La familia la recuerda como una persona generosa y entregada, cualidades que su sobrina Sydney subrayaba en redes sociales:
Ahora, el actor y el resto de la familia afrontan el duelo intentando honrar su memoria y aferrándose al legado de amor y valores que ella les deja.