La manifestación se dio en simultáneo con el discurso presidencial sobre el Presupuesto 2026. El reclamo se replicó en varios barrios porteños y fue autoconvocado por redes sociales.
⭕️ | ÚLTIMO MOMENTO: Mientras Javier Milei presenta el Presupuesto 2026, LOS VECINOS DE BALVANERA REPUDIAN AL PRESIDENTE LIBERTARIO CON UN CACEROLAZO MASIVO.
— Diagonales (@diagonalesweb) September 16, 2025
‼️ El Gobierno pierde el apoyo de la gente. LA CREDIBILIDAD DE JAVIER MILEI SE DEBILITA EN TODO EL PAÍS. pic.twitter.com/iiTZGVIiy9
Mientras el presidente Javier Milei presentaba en Cadena Nacional los lineamientos del Presupuesto 2026, vecinos del barrio porteño de San Telmo iniciaron un cacerolazo ensordecedor en rechazo a las políticas de ajuste fiscal y los recientes vetos presidenciales a leyes clave como la de Emergencia Pediátrica y la de Financiamiento Universitario.
La protesta, convocada de forma autónoma y espontánea a través de redes sociales, se desarrolló desde las 21 horas y se replicó en otros puntos de la Ciudad de Buenos Aires, como Caballito, Recoleta, Parque Patricios, Almagro y Constitución, entre otros. La consigna que circuló entre los manifestantes fue clara: “Si Milei hace oídos sordos, hagámonos escuchar”.
El cacerolazo no fue organizado por partidos políticos ni agrupaciones sociales, lo que refuerza su carácter ciudadano y transversal. Los participantes denunciaron el impacto de los recortes en áreas sensibles como salud infantil, educación pública y universidades nacionales, y anticiparon su adhesión a la Marcha Federal convocada para el próximo 17 de septiembre frente al Congreso.
En San Telmo, los vecinos salieron con cacerolas, silbatos y carteles, mientras desde los balcones se sumaban al ruido como forma de protesta. La movilización se mantuvo pacífica, aunque con fuerte presencia policial en algunas esquinas estratégicas.
El mensaje presidencial, grabado en la Casa Rosada, destacó el equilibrio fiscal como “piedra angular” del modelo libertario y anunció aumentos en salud, educación y jubilaciones por encima de la inflación. Sin embargo, los manifestantes consideran que estas medidas no compensan los vetos a leyes aprobadas por el Congreso, ni el deterioro de servicios esenciales.
El cacerolazo de San Telmo se suma a una serie de expresiones de malestar social que vienen creciendo en distintos sectores del país, y que podrían intensificarse en las próximas semanas ante el tratamiento legislativo del nuevo presupuesto.
