
La Casa Real británica ha comunicado que el rey Carlos III ha experimentado una evolución positiva en su tratamiento contra el cáncer, lo que permitirá reducir la intensidad de las terapias a partir del próximo año. El propio monarca ha anunciado esta mejora en un mensaje televisado, en el que ha destacado que, gracias a un diagnóstico precoz y a la eficacia de las intervenciones médicas, podrá disminuir la frecuencia de los tratamientos en los próximos meses. Esta intervención, grabada el 27 de noviembre en Clarence House y emitida por Channel 4, ha formado parte de un programa especial dedicado a la lucha contra el cáncer.
En su mensaje, Carlos III ha subrayado la importancia de la detección temprana y ha compartido su preocupación por el hecho de que, en el Reino Unido, al menos nueve millones de personas no están al día con las pruebas de cribado disponibles. “Eso supone nueve millones de oportunidades de no lograr un diagnóstico temprano”, ha advertido el monarca, quien ha insistido en que “un diagnóstico temprano, simplemente, salva vidas”.
El rey ha aprovechado la ocasión para respaldar una nueva campaña nacional que, a través de la web screeningchecker.co.uk, permitirá a los ciudadanos consultar los programas de detección a los que pueden acceder.
El monarca responde “excepcionalmente bien” al tratamiento
El Palacio de Buckingham ha confirmado que Carlos III ha respondido “excepcionalmente bien” al tratamiento, y que los médicos han recomendado pasar a una “fase preventiva”, centrada en la vigilancia y el seguimiento para evitar una posible reaparición de la enfermedad. “Esta situación será continuamente vigilada y revisada para proteger y dar prioridad a su continua recuperación”, ha explicado un portavoz de la Casa Real. No obstante, ni el tipo de cáncer ni los detalles concretos de los tratamientos han sido revelados, en línea con la tradicional discreción de la familia real británica respecto a cuestiones de salud.
La actividad pública del monarca ha experimentado una notable recuperación en los últimos meses. Tras mantener una presencia limitada durante los tres primeros meses de tratamiento, Carlos III ha retomado su agenda institucional, incluyendo visitas oficiales como la realizada al centro oncológico MacMillan Cancer Center de Londres el pasado 30 de abril, y desplazamientos internacionales, entre ellos una reciente visita al Vaticano.
El rey ha insistido en la necesidad de combinar la compasión con la acción en la lucha contra el cáncer: “Como ya he señalado en alguna ocasión, los momentos más oscuros de la enfermedad pueden ser iluminados por la mayor de las compasiones. Pero la compasión debe ir acompañada de acción. Este diciembre, cuando nos juntemos para reflexionar sobre el año que ha pasado, rezo para que cada uno de nosotros se comprometa, dentro de la lista de propósitos del año entrante, a desempeñar la parte que le corresponda en atrapar al cáncer en una fase temprana”, ha solicitado el monarca en su intervención televisiva.
