El camino fácil que destruye a la sociedad
De todos los cambios que atraviesa la sociedad, tal vez el más destructivo sea el que se refiere a la manera de progresar económicamente elegida por muchos de sus integrantes. Atrás quedó la posibilidad de movilidad social basada en el esfuerzo y la capacitación que durante tanto tiempo caracterizó a la Argentina. Los asesinatos ocurridos recientemente en la provincia de Buenos Aires son una muestra cabal de una realidad que ensombrece a un país donde las posibilidades de progreso económico estaban al alcance de todos aquellos dispuestos a emprender un camino de estudio y sacrificio para lograr sus objetivos. Lamentablemente hoy colaborar con el narcotráfico se presenta como una opción donde los resultados se obtienen de manera inmediata, sin mayor esfuerzo y sin importar la edad. La falta de control en todos los ámbitos facilita que caigan en la tentación aquellos que, sin medir las consecuencias, por necesidad o ambición económica, se inician en el tráfico de drogas. Los cambios producidos en la sociedad, donde vale todo, los valores morales se dejaron de lado y lo que cuenta es obtener dinero -no importa el origen- hacen muy difícil concientizar a las nuevas generaciones sobre los beneficios de elegir el camino de progreso más largo y duro. Hijos que viven con padres que nunca trabajaron, chicas que se embarazan para cobrar planes y otras que eligen la prostitución como trabajo redituable son parte de la realidad de hoy. Se necesita un cambio estructural en la familia y en la sociedad, una escuela que forme y capacite en lugar de que adoctrine y una justicia que cumpla su rol. No podemos seguir ignorando la magnitud de los hechos ante una realidad que es evidente.
Adriana DiPaolo
DNI 6.221.705
Más educación, mejor país
Solo diez de cada 100 alumnos terminan el secundario en tiempo y forma y con los aprendizajes mínimos de lengua y matemática. En Chaco, tres; en Catamarca y Misiones, cuatro. Al resto los estafamos. Les damos un diploma que dice que aprendieron lo que no aprendieron. Los hundimos en la peor de las ignorancias, la del que no sabe que no sabe. Les dimos el pescado pero no les enseñamos a pescar. Para que de verdad puedan oír el ruido de rotas cadenas y cantar libertad, libertad, libertad, necesitamos más y mejor educación. Años de descuido educativo y de una sociedad entera mirando para otro lado. Es urgente que pongamos el aprendizaje verdadero como objetivo de progreso, de libertad de decisión, de salida de la pobreza. Argentinos por la educación nos grita con sus datos que el rey está desnudo. Pero si seguimos sin ocuparnos del tema, ya no solo le dejaremos un país ignorante a nuestros hijos, también dejaremos hijos ignorantes para nuestro país. Educación, educación, educación. El único camino para ser una mejor Argentina.
Eduardo Cazenave
DNI 18.562.666
Falta de memoria
¿Será que nuestro pueblo está destinado a la frustración? ¿A no tener esperanza? ¿A vivir completamente resignado de que es esto, nada más, y no hay ninguna visión de futuro? Creo que sí, porque nuestra ciudadanía no tiene memoria. No recuerda cómo veníamos y a lo que íbamos como país, con una hiperinflación a la vuelta de la esquina, piquetes constantes y midiendo las góndolas para poder controlar los precios (que claramente era una burrada). En las últimas décadas atravesamos diversos shocks económicos, devaluación tras devaluación, y me pregunto: ¿acaso creen que el país va a estar mejor si vuelven los que gobernaron en el pasado reciente? Porque ellos nos trajeron a esta situación y al parecer la gente no lo recuerda, a pesar de que los vemos discutir ahora en el Congreso, en el Senado. Todos esos personajes son los que nos han llevado a esta situación. Y todos los presidentes, claro está, especialmente los que estuvieron y están con causas de corrupción en su haber.
Entonces, vuelvo a preguntarme: ¿qué es a lo qué queremos volver? Ojalá empecemos a recordar y a repasar la película completa.
Tomás Delgado
DNI 35.718.623
Espert
Que Espert haya cometido un delito o sea ingenuo deberá resolverlo su propia conciencia y determinarlo eventualmente la justicia, pero de lo que piensen de él los votantes de la provincia de Buenos Aires dependerá el triunfo o el fracaso de su candidatura.
Juan Peña
Un cambio moral
Somos un país dividido en sus principios y valores donde no existe un consenso básico sobre qué es lo correcto, lo justo y lo deseable para la vida común. Esa división no es simplemente de opiniones políticas, sino algo más profundo: toca la raíz cultural, moral y espiritual de la sociedad. Ser conscientes de nuestra decadencia nos ayuda a examinar, a conocernos y decidir mejor. Nuestra confusión es moral. Unos buscan conservar tradiciones, otros romperlas; unos priorizan la libertad individual, otros el bien común. Nuestra pérdida de confianza es mutua, porque cada sector sospecha que el otro no solo piensa distinto, sino que amenaza su forma de vida. Estamos fragmentados socialmente y este debilitamiento ya es institucional, porque cuando los valores no son compartidos, las leyes y las normas se discuten no en su aplicación, sino en su legitimidad. Los países que funcionan no tienen doble moral, ni opositores enemigos del sistema, políticos delincuentes libres y amparados por el sistema que ellos mismos corrompieron y nosotros dejamos corromper. Argentina necesita un cambio moral, en sus costumbres, principios y valores. Ese es el cambio esencial para poder alcanzar nuestra mejor versión. ¡Vamos Argentina!
Fernando J. Bustillo
Acusaciones cruzadas
Periodistas opositores dicen que militantes revoltosos y patoteros representan a la sociedad enojada, pues bien, los ciudadanos de a pie estamos hartos que medios de comunicación de un lado y del otro nos interpreten a su gusto y piacere. Asistimos a acusaciones cruzadas de corrupción, narcotráfico, prostitución y cuanta felonía exista, ciertas o no, se instalan y son la causa de la baja asistencia a las elecciones (es todo lo mismo). Hay una Argentina de argentinos que estudian y trabajan en paz y tranquilidad, esperemos que alguna vez sean correctamente interpretados y representados.
Pedro Pablo Farias
DNI 11.420.597
Ataque terrorista
Impecable EL editorial de LA NACION del viernes pasado acerca del “justo homenaje a 50 años de un criminal ataque terrorista”. Acaeció el 5 de octubre de 1975, un domingo, con el saldo de 13 victimas mortales que defendieron el cuartel heroicamente. En 2022 y 2023 impulsamos un proyecto de ley para reparar a las familias de las victimas de esos asesinatos ya que el DNU del presidente Macri fue expresamente incumplido por el Ministerio de Defensa en el período del gobierno kirchnerista. Personalmente le reclamé al ministro Jorge Taiana, en una reunión de la Cámara de Diputados de la Nación, pero me respondió que “hasta que no aprueben una ley no habrá reparación”.
Tardíamente, esa mínima justicia llegó con el actual gobierno.
Especialmente quiero rendir homenaje a Jovita Luna, hermana del conscripto Hermindo, asesinado en ese infame ataque. Jovita luchó hasta su fallecimiento por la justicia. No la alcanzó a ver en vida.
Este ataque cuyo cincuentenario memoramos fue cruel y marcó el comienzo del derrumbe del terrorismo que sufrió nuestro país.
Alberto Asseff
Presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados de la Nación (2022/2023)
Fundación Favaloro
Es bueno ir atrás en el tiempo en ciertos sucesos sociales para tener fundamentos, como enseñó también Félix Luna con su ejemplo y su obra como intelectual, al integrar como pocos la Historia al periodismo. Pasó recién en la gala donde se celebraron los 50 años de la Fundación Favaloro y su difusión. Casi seguro fue por la emoción y la inmediatez o timidez que se omitió citarlo incluso en gacetillas al otro fundador de la entidad creada por entero en su origen para el paciente indigente: Luis M. De la Fuente, el socio médico de Favaloro de 1971 a 1992. Ni se lo cita en la web institucional de la fundación. Juan José Favaloro se sumó al breve tiempo como cofundador. Ricardo Pichel sí informa de esto en el interesante documental de LA NACION y Liliana Favaloro, la excepción, hasta lo catalogó de héroe en una nota. Todo el proceso surgió desde el Sanatorio Güemes en 1974-75 hasta 1992 en su entera fase asistencial con dicha escuela médica. Incluso el bypass aortocoronario fue desarrollado también desde la Argentina al mundo a partir de 1971 y luego la angioplastia y el stent coronario. Favaloro no operaba si De la Fuente no hacía los diagnósticos y el cateterismo y su interpretación, así como los post-operatorios.
Luna, casado con mi tía abuela, hubiera cumplido 100 años hace días y René Favaloro 102. La verdad histórica no tiene o sabe de edades ni de medias tintas y, la memoria no es solo cuestión de neurotransmisores.
Por lo demás, las felicitaciones obvias a la Fundación y a este prestigioso diario.
Héctor De la Fuente Fitte
DNI 20.009.712