Una pareja fue detenida por estafar a personas que esperaban una vivienda social en Santiago del Estero. La investigación reveló que la mujer arrestada realizaba publicaciones en la red social Facebook, en las que agradecía a un supuesto abogado por haberle gestionado una vivienda del Instituto Provincial de Vivienda y Urbanismo, ofreciendo el contacto para quienes se interesasen en ese servicio. Una vez que las personas se comunicaban, les solicitaba documentación personal y $450.000, informes y dinero que debían ser entregada en mano a un cadete. Luego de recibir la suma, esa estafadoras y su esposo bloqueaban a las víctimas, eliminando todo tipo de contacto.
El procedimiento judicial que culminó con la detención de esa mujer en el marco de una causa por estafa en grado de tentativa fue solicitado por el Juez de Control y Garantías Héctor Salomón, tras un pedido del fiscal Mauricio Abramczuk. Personal del Departamento Delitos Económicos, con colaboración de la División Robo y Hurto de la policía santiagueña realizaron la investigación.
El allanamiento se realizó en un domicilio situado en Los Caminantes1945, en el barrio General Paz de la capital santiagueña, donde se concretó la detención de María Herminia Luna, de 42 años, quien por disposición del magistrado actuante permanece con arresto domiciliario dado que vive con su hijo menor de edad.
Unos días antes había sido arrestado en la misma causa Luis Leonardo Ramírez, pareja de la mujer detenida.
Ramírez utilizaba una treta diferente a la de su esposa para captar a las víctimas. Se hacía llamar Julio Abdala y se presentaba como una persona con contactos que le permitían acelerar la adjudicación de las viviendas sociales.
Una de las víctimas que presentó la denuncia sostuvo varias comunicaciones, realizadas con mensajes y audios de WhatsApp, en las que el ahora detenido le pidió $350,000, la ficha de inscripción al plan y la fotocopia del documento con la promesa que en aproximadamente un mes le asignarían la vivienda. Además, le solicitó que el dinero fuese entregado en efectivo y junto con la documentación, los cuales eran retirados por un cadete. La denunciante empezó a sospechar y realizó una denuncia por la cual comenzó la investigación. En el allanamiento se encontraron seis teléfonos celulares, pedazos de un sobre papel madera y el DNI de la víctima.
La causa continúa en investigación por parte del Ministerio Público Fiscal. Por el momento hay cinco víctimas que realizaron las respectivas denuncias, pero los detectives sospechan que otros damnificados sumarán sus casos al expediente.