Son meses de nuevos horizontes para la cantante y compositora Chule von Wernich (27). Separada desde diciembre pasado del polista 10 de handicap Bartolomé Castagnola (24), hoy está totalmente enfocada en su carrera musical: la semana pasada salió “Para ser perfecta”, el primer single del álbum que va a lanzar el año que viene; y, además, acaba de volver del norte de España en un vuelo que la trajo desde Comillas, Cantabria, donde fue a cantar y vivió una experiencia inolvidable. “Comillas es un pueblo soñado. Me fui diez días con Olivia Wald, Valentina Olguin y Martu Brito, todas artistas a las que nos representa Fran Larguía, e hicimos tres fechas en La capilla Music Hall, una sala de música espectacular que alguna vez fue la capilla de la universidad local”, cuenta con entusiasmo la joven nacida en Pehuajó que la rompe en sus redes sociales (en Instagram tiene 266 mil seguidores).
Y sigue: “La invitación llegó de parte de un productor que nos vio en TikTok cantando folclore y quiso hacer una experiencia distinta llevando allá música argentina. Fue una gran experiencia, donde, además de los shows, hicimos vida de verano, con playa incluida”. Sobre el disco que tiene listo, adelanta que se llamará Reflexiones de mi vida hasta ahora, y que el single recién estrenado es “una canción de empoderamiento personal, habla de las presiones y crítica a las expectativas sociales que enfrentan muchas mujeres hoy en día. Refleja el agotamiento de intentar cumplir con mandatos sociales sin perderse en el intento”. Por último, al preguntarle por su corazón y si la separación del crack de polo es definitiva (empezaron a salir en 2022 y se conocían desde hacía años por amigos en común), responde: “Estoy bien. Necesitaba volver a enfocarme en mi música y no era el momento para la relación, pero está todo bien. No sé qué irá a pasar, estamos viendo… Es difícil, él viajando tanto y yo también”.