Aunque se limpie la cocina a diario, puede aparecer mal olor y despertarse una gran incógnita: ¿Qué lo provoca? Una causa muy común está relacionada con la heladera. Cuando se obstruye el drenaje interno se acumula agua en su interior, lo que lleva a la reproducción natural de hongos y bacterias en el interior del aparato.
En la mayoría de los modelos este orificio se encuentra en la parte trasera del interior de la heladera. La tarea de este drenaje es permitir que el agua que se acumula por el frío y la humedad fluya hacia una bandeja de recolección ubicada en la base. Pero, cuando se tapa con restos de comida, moho o suciedad, empiezan los problemas. Algunas pistas para saber si el drenaje se encuentra tapado son:
- Hay agua estancada en el fondo de la heladera o en los cajones.
- Aparecen malos olores, similares a comida podrida o moho.
- Se notan gotas constantes en la pared trasera.
- La heladera pierde rendimiento y no enfría como antes.
El bloqueo de este conducto puede provocar desde pequeños charcos hasta una disminución en la capacidad de refrigeración del aparato, lo que impacta en la conservación de los alimentos y en el consumo energético.
Cómo destapar el desagüe de la heladera paso a paso
Aunque parezca algo catastrófico, resolver este problema es muy sencillo y no requiere herramientas sofisticadas. Según el portal especializado en electricidad y reparación de electrodomésticos Domex, este es el método más efectivo:
- Desenchufar la heladera. Siempre se debe cortar la corriente eléctrica antes de iniciar cualquier limpieza.
- Vaciar la heladera. Se deben retirar los alimentos y cajones para tener acceso total a la parte inferior trasera.
- Secar el área. Usar un trapo o toalla para eliminar el agua acumulada en el fondo.
- Quitar la tapa del drenaje (si la tiene) y limpiar alrededor del orificio.
- Desbloquear el canal. Para esto se debe introducir de forma muy suave una herramienta delgada, como una pajita, un hisopo o un limpia pipas, sin soltarla en el interior. Se recomienda mover el artefacto de limpieza adelante y hacia atrás para despejar por completo el conducto.
- Verificar que el agua fluya. Para saber si la limpieza fue efectiva es recomendado verter un poco de agua por el orificio para comprobar que ya no está obstruido.
- Volver a armar y encender. Una vez que se limpia por complejo el orificio deben volver a colocarse todas las piezas correctamente. Se recomienda esperar algunas horas y luego enchufar nuevamente la heladera. Dejar que retome su temperatura habitual y después de comprobar que todo sigue en perfecto estado, recién allí sumar los alimentos a sus compartimientos.
Aunque no siempre es posible evitar que el drenaje se bloquee, una buena práctica es limpiar el interior de la heladera al menos una vez al mes para evitar que los restos de comida o líquidos lleguen hasta la zona trasera. También, es útil revisar que no se acumule agua en el fondo de este electrodoméstico.