Esta pequeña y deliciosa creación de repostería es una joya de la cocina europea. Los scones forman parte importante de la gastronomía británica y son ampliamente reconocidos por sus tradiciones culinarias, especialmente para la hora del desayuno o para acompañar el té. Estos se caracterizan por su tamaño y por su textura crujiente.
Según Gourmet de México “su origen se encuentra en la panadería dulce, pues fue un panadero quien buscó replicar la forma de una pieza divina que se heredó durante muchos años entre diferentes localidades”. Por lo que el panadero quiso replicarlo en un pequeño pan, siendo hasta el siglo XIX uno de los bizcochos favoritos para acompañar el té.
Aunque originalmente se preparaban con ingredientes como mermeladas o frutos secos, hoy en día se han diversificado pues se pueden encontrar versiones tanto dulces como saladas. Esta elaboración utiliza moras azules, una fruta que aporta frescura y da un contraste ideal de texturas.
Receta de scones de mora azul
Esta es una receta que puedes encontrar dentro del catálogo de Larousse Cocina. Su preparación es de una dificultad alta y consta de un tiempo aproximado de dos horas con 30 minutos.
Ingredientes
Paso 1 – Masa madre libre de gluten
- 50 g de Fermento o “bichos” sin gluten
- 175 g de yogur griego o natural
- 50 g de huevo batido
- 25 g de miel de abeja
- 200 g de harina de arroz
- 120 g de harina de tapioca
- 80 g de harina de avena
- 100 g de mantequilla suave
Paso 2 – Masa de scones
- 50 g de azúcar
- ralladura de limón amarillo, al gusto
- 3 g de sal
- 10 g de goma xantana
- 20 g de polvo para hornear
- 110 g de mantequilla congelada, cortada en cubos
- 180 g de moras azules, congeladas
Horneado
- 1 huevo ligeramente batido para barnizar
- cantidad suficiente de azúcar para espolvorear
Preparación
Paso 1 – Masa madre libre de gluten
- Disuelve el fermento en el yogur lo mejor posible en un recipiente e incorpora el huevo. Integra la miel de abeja y reserva
- Mezcla las harinas (arroz, tapioca y avena) e incorpora la mantequilla frotando las yemas de los dedos con las harinas
- Integra los ingredientes del paso 1 (el fermento disuelto) en la mezcla de harinas con mantequilla hasta obtener una masa cohesionada
- Deja fermentar la preparación de 4 a 5 horas a temperatura ambiente
Paso 2 – Masa de scones
- Mezcla el azúcar, la ralladura de limón y la sal frotando con los dedos de tal manera que se impregne el aroma del limón; integra la goma xantana y el polvo para hornear. Incorpora la mantequilla
- Agrega la mezcla anterior a la masa madre libre de gluten y mezcla hasta obtener una masa cohesionada. Integra la mantequilla congelada para que no se mezcle en la masa. Divide la masa en dos partes iguales
- Compacta la mitad de la masa en un molde cuadrado de 20 x 20 centímetros hasta formar una capa uniforme de 1 centímetro de grosor; distribuye la mitad de las moras azules en la superficie, haciendo presión sobre la fruta congelada para incrustarla en la masa
- Distribuye el resto de masa sobre la capa de moras azules, dejando encapsuladas las moras entre las dos capas de masa, y compactando lo mejor posible la masa para obtener un grosor uniforme
- Retira la masa del molde e incrusta el resto de las moras azules de la misma manera que la primera capa, descrita en el paso 3. Envuelve la masa en plástico autoadherente y reserva en congelación durante 1 hora. Retira la masa de congelación y corta con la forma de tu preferencia; puedes utilizar un cortador redondo para obtener como resultado final scones redondos. Barniza con huevo y espolvorea una capa de azúcar
Horneado
- Precalienta un horno de convección a 175 °C y hornea los scones con moras azules durante 20 minutos aproximadamente o hasta que tengan un dorado uniforme. Retira del horno y deja enfriar los scones en una rejilla
¿Qué es y para qué sirve la mora azul?
La mora azul también es conocida como blueberry, una fruta pequeña de color morado intenso que crece en los arbustos. Gracias a su sabor y consistencia es muy utilizada en los desayunos ya sea en jugos, licuados, smoothies o en platos de frutas frescas.
De acuerdo con Larousse “la mora azul es medianamente energética (60 kcal o 250 kJ por 100 g), muy rica en vitamina E y rica en vitamina C. Contiene polifenoles (antocianinos) que tienen una función antioxidante. La mora azul silvestre debe lavarse muy bien para evitar la ingestión de parásitos de animales salvajes”.
Al combinarla con más frutas que contengan los mismos nutrientes y propiedades se refuerzan sus beneficios, pues permite hacer un platillo o bebida más completo e ideal para una alimentación más balanceada.
Además de sus propiedades antioxidantes es fuente de fibra y tiene efectos antiinflamatorios, al igual que fortalece el sistema inmunológico. Por su versatilidad, valor nutricional y propiedades es uno de los ingredientes más útiles dentro de los desayunos.