Con Messi solo no alcanza: Inter Miami tuvo un debut con varias complicaciones y no le pudo ganar a Al Ahly

admin

MIAMI (Enviado especial).– La noche prometía historia, pero entregó espectáculo. Y aunque la pelota no fue protagonista, sobraron luces y color. En el imponente Hard Rock Stadium, con Lionel Messi en la cancha y el Mundial de Clubes como escenario, comenzó la nueva edición del torneo que reúne a los mejores equipos del planeta, con un premio de 1.000 millones de dólares en juego. El primer acto fue el cruce entre Inter Miami y Al Ahly de Egipto, pero más que un partido, se vivió una experiencia al estilo NBA: presentación individual de los jugadores, entrevistas en pleno entretiempo y árbitros equipados con cámaras “on board” para grabar sus decisiones y sus conversaciones con los futbolistas. En las tribunas sobraban butacas vacías y, curiosamente, los gritos más fuertes no fueron para Inter ni para Al Ahly, sino para Boca. Un buen número de hinchas xeneizes se hizo escuchar como si el partido fuera suyo, aprovechando que el lunes el equipo debuta en ese mismo estadio contra Benfica. El resto siguió la corriente y, quizás sin entender del todo qué significaba, se sumó a cantar “el que no salta se fue a la B”.

El partido, que quedó en un segundo plano, tuvo a Óscar Ustari como figura: atajó un penal y también el rebote. El ejecutor fue Trézéguet, cuyo nombre real es Mahmoud Ahmed Ibrahim Hassan, pero en Egipto es costumbre que los jugadores adopten el seudónimo de sus ídolos. En el banco también estuvieron Ahmed Sayed Zizo (en honor a Zinedine Zidane) y Beckham, cuyo nombre verdadero es Ahmed Ramadan. Por momentos, todo pareció una gran puesta en escena, una versión teatral del fútbol que conocemos en esta parte del continente. Y el árbitro iraní Alireza Faghani pareció estar en la misma sintonía: no quiso arruinar la fiesta y le perdonó la vida al argentino Tomás Avilés, de Inter Miami, que mereció la roja en el primer tiempo.

Oscar Ustari, arquero de Inter Miami, se lució desviándole un penal a Trezeguet

Tal vez no sea lo que el hincha tradicional espera ver, pero sí lo que el mercado busca consumir. Incluso la figura de Messi quedó eclipsada por el entorno. El astro argentino alternó momentos de inspiración con errores impropios de él: perdió una pelota clave que casi termina en gol rival y, poco después, estrelló un remate en el palo. Este tipo de partidos quizá no lo estimulen demasiado, al menos frente a rivales sin historia, pero su talento sigue intacto. Tampoco fue tan distinto a lo previsto: un Al Ahly –segundo club más ganador de los 32 participantes– más ordenado y preciso, frente a un Inter Miami ingenuo, que regaló pelotas en salida y se sostuvo en los destellos de Messi y Luis Suárez, que recién se activaron sobre el cierre del primer tiempo.

Acá el fútbol se vive de otra manera, tanto dentro como fuera de la cancha. Recién una hora antes del inicio comenzaron a llegar los primeros hinchas, en su mayoría con camisetas argentinas: de Messi o de Boca. También hubo una buena presencia de egipcios. Aun así, el Hard Rock Stadium estuvo lejos de llenarse: apenas un 70% de ocupación, a pesar de que las entradas habían bajado de precio en los días previos. Da la sensación de que el evento está pensado para el público local, siguiendo la línea de la Copa América 2024, como parte de una estrategia para impulsar el fútbol en el país de cara al Mundial 2026. Para los sudamericanos, el espectáculo pareció distante y algo frío, ajeno a su manera de sentir el fútbol. El partido ofreció varias chances de gol y momentos de buen juego, sobre todo cuando apareció Messi, aunque no colmó las expectativas.

El equipo de Mascherano mejoró en el segundo tiempo: Messi levantó y tuvo un par de chances claras, incluido un zurdazo combado en el final que casi vence al arquero El Shenawy, mientras que Suárez aportó todo su oficio y también generó espacios y posibilidades. Pero no alcanzó. Era lógico: el rival partía como favorito, y el resultado terminó siendo justo, con un tiempo para cada uno, pese a que Inter mereció más en el cierre.

Lo mejor del torneo seguramente está por venir. Este fue apenas el primero de los 63 partidos que tendrá la competencia, y además enfrentó a dos equipos que no figuran entre los candidatos. Este domingo, Bayern Munich enfrentará a Auckland City; PSG, flamante campeón de la Champions, se medirá con el Atlético de Madrid de Simeone; y Palmeiras jugará contra Porto, ambos por el mismo grupo que Inter Miami. El lunes llegará el estreno de Boca, y el martes será el turno de River, frente a Urawa Red Diamonds.

Lionel Messi y un intento de gambeta ante Mohamed Ali Ben Romdhane durante el partido ante Inter Miami y Al Ahly

El partido inaugural impresionó a los ojos, pero no los llenó. Un debut sin goles que hizo que la fiesta no fuera completa para nadie.

Deja un comentario

Next Post

Pruebas Aprender: cómo enseñar a pensar

Los resultados de la Prueba Aprender 2024 no sorprendieron, pero sí deberían alarmarnos: solo el 14,2% de los estudiantes de secundaria logró un nivel satisfactorio en Matemática. Y mientras discutimos metodologías, calendarios y agendas políticas, miles de adolescentes salen del sistema educativo sin herramientas mínimas para leer el mundo con […]
Pruebas Aprender: cómo enseñar a pensar

NOTICIAS RELACIONADAS

error: Content is protected !!