A principios de este mes, Netflix estrenó Limpia, una película de origen chileno que rápidamente se volvió furor en la plataforma por su trama dramática y reveladora. Este thriller psicológico de poco más de una hora envuelve al espectador en la historia estremecedora de Estela, una empleada domestica que constantemente se enfrenta a un presente desigual.
Mes a mes el catálogo de la N roja se actualiza con nuevas producciones, tanto originales como pertenecientes a otras compañías distribuidoras. Esta cinematografía dirigida por Dominga Sotomayor promete atrapar a los usuarios hasta el último minuto.
De qué trata Limpia, el thriller chileno con una profunda denuncia social
La trama inicia en la mansión de una familia de clase alta de Santiago de Chile, donde Estela trabaja como empleada doméstica. Además de realizar las tareas del hogar, cuida de la hija menor del matrimonio, Julia. La pequeña de seis años forja un vínculo cercano con ella al punto de transformarse en una dependencia que marca la diferencia de los niveles socioeconómicos.
Según dijo Sotomayor en la presentación del film, es “un encuentro entre soledades” que aparenta ser un trato horizontal, pero que, a medida que la película avanza, se develan las desigualdades sociales y las heridas profundas que marcan a Estela y a Julia.
El largometraje es una adaptación de la novela homónima de Alia Trabucco Zerán, que tras el lanzamiento se volvió un best seller. Aquí quedan en evidencia las dinámicas de poder entre las familias adineradas y sus empleados. Además, identifica en detalles sutiles la debilidad del hogar y los puntos frágiles que quedan al descubierto y por los que Estela debe trabajar para sostener.
En la construcción de cada escena, los silencios, las miradas y ciertos gestos son culpables de tensiones y muestras de cariño entre Julia y Estela. La primera carente de afecto por sus padres y la segunda con faltas sustanciales.
La empleada doméstica no solo llegó a esa casa para atender a la familia, sino que el mensaje detrás pretende enseñarla como un orden moral, que invita a la reflexión por parte del espectador.
Mara, la madre de Julia, es una mujer que desconoce las lógicas de aquellas personas que no viven dentro de su mismo contexto. Por ese motivo, en cada escena define la diferencia de clase con Estela, casi al punto de transformarse en una conducta naturalizada.
La tranquilidad de ese verano en el que transcurre la historia da un giro tras una tragedia que deja sin trabajo a Estela, quien es señalada como una inservible que nunca tuvo influencia en el hogar. Ese es el puntapié para una sucesión de desgracias hasta el final abrupto.
Limpia desenmascara la invisibilidad de aquellos trabajadores opacados por los lujos, la grandeza y el ajetreo de las familias ricas de Chile. Carga con una fuerte denuncia e intenta transmitir los sentimientos que una persona en aquella situación de desventaja puede sufrir a menudo.
La crítica sobre la película de Sotomayor en general es positiva, donde expertos en cine destacaron la construcción narrativa de los planos, los diálogos, gestos y silencios, al tiempo que se hizo hincapié en la duración adrede de las escenas significativas.
El elenco está compuesto por María Paz Grandjean [Estela], Rosa Puga Vittini [Julia], Ignacia Baeza, Benjamín Westfall y Rodrigo Palacios.