El caso de Gustavo Salcedo y su conflicto con Christian Rodríguez sumó nuevas aristas tras la reciente agresión ocurrida el 26 de septiembre en San Borja. Magaly TV La Firme dio a conocer el historial documentado por la Policía Nacional del Perú (PNP), donde se puede ver un patrón persistente de ataques, amenazas y hostigamiento.
“Temo por mi vida y la de mi familia”, sostuvo Rodríguez, exproductor del programa ‘Arriba mi gente’, al detallar un expediente de episodios violentos, acoso y amedrentamiento que atribuye a la expareja de Maju Mantilla.
Según consta en la denuncia presentada, Christian Rodríguez Portugal relató que desde marzo de 2025 recibió amenazas de muerte, seguimientos y hasta objetos intimidatorios en su domicilio. En el parte policial, el productor vinculado a Maju Mantilla narró que el primero de los ataques se produjo el 22 de marzo, cuando fue interceptado mientras practicaba deporte en el malecón de Miraflores.
Primera agresión fue un codazo en el rostro
De acuerdo con la declaración policial, Gustavo Salcedo se aproximó y lo golpeó con un codazo en el rostro, hecho que provocó su caída al suelo y una pérdida momentánea de conciencia. El testimonio añade que, tras el incidente, fue trasladado a la clínica Ricardo Palma donde recibió suturas por una herida en la cabeza.
En la denuncia presentada ante la PNP, Rodríguez incluyó, además del ataque físico, elementos de acoso sistemático. El productor afirmó que tras el incidente en Miraflores recibió mensajes amenazantes desde números desconocidos. Los mensajes incluían advertencias directas contra él y miembros de su familia. La gravedad aumentó cuando comenzó a ser seguido por vehículos sin placa en las inmediaciones de su domicilio y en trayectos habituales.
Uno de los episodios señalados como muestra de amedrentamiento ocurrió el 11 de septiembre de 2025, cuando, según relató Rodríguez a la PNP, llegó a su vivienda una corona fúnebre con el mensaje: “Cuídate mucho, con cariño”. El exproductor interpretó este acto como una amenaza directa, que lo llevó a temer por la integridad de su esposa y su hijo de 11 años. La denuncia incluye además la frase “los van a llenar de plomo”, recibida en uno de los mensajes intimidatorios, evidencia que permitió a las autoridades perfilar la situación bajo un contexto de violencia y acoso.
Chocó su autó y golpeó a productor
El segundo episodio de violencia sucedió el 26 de septiembre, a la salida de un estudio de abogados en San Borja. Christian Rodríguez se hallaba junto a su familia cuando una camioneta gris lo embistió por la parte trasera de su vehículo. El exproductor de Maju Mantilla aseguró haber reconocido de inmediato al agresor como Gustavo Salcedo, quien descendió del automóvil tras el impacto y volvió a atacarlo a golpes en la cabeza.
“He reconocido a la persona y es Gustavo Salcedo”, afirmó el productor delante de los agentes policiales y testigos que asistieron a la escena. El ataque fue presenciado por su esposa e hijo, lo que incrementó la alarma sobre el riesgo para todo el núcleo familiar.
Rodríguez fue conducido por segunda vez a la clínica Ricardo Palma, donde recibió atención médica por las heridas infligidas. Según Magaly TV La Firme, tras abandonar la clínica aún era visible una mancha de sangre en el polo, reforzando la gravedad del ataque.
Persecusión y amenazas
Además de las agresiones, el expediente presentado a la PNP incluye el seguimiento que Rodríguez y su familia sufrieron en diferentes espacios públicos. El productor denunció la presencia inusual de automóviles sin matrícula estacionados cerca de su hogar o circulando tras él, hechos que describe como parte de un esquema de acoso planificado.
La denuncia policial también resalta las amenazas y advertencias recibidas no solo lo mencionaban a él, sino también a su esposa e hijo, quienes fueron citados por el agresor en los mensajes amenazantes. Las investigaciones abiertas por la Policía Nacional del Perú buscan establecer la responsabilidad de Gustavo Salcedo en los hechos denunciados y determinar si existieron terceros involucrados en los seguimientos y envíos intimidatorios.
El proceso legal aún continúa y tanto la defensa de Christian Rodríguez como las autoridades han solicitado garantías personales para toda la familia, frente al temor manifestado de nuevas agresiones. Rodríguez ha preferido mantener el perfil bajo desde los hechos más recientes y ha evitado declaraciones públicas.