La internación de Cristina Kirchner volvió a poner en foco una de las urgencias quirúrgicas más frecuentes: la apendicitis. En LN+, el médico Jorge Tartaglione explicó en detalle de qué se trata este cuadro, cuáles son los síntomas de alerta y cómo es el postoperatorio, al tiempo que aclaró por qué una atención a tiempo puede evitar complicaciones graves, incluso la muerte.
Según indicó el especialista, la apendicitis puede evolucionar rápidamente si no se detecta a tiempo. “Es una punta del intestino grueso de unos ocho a diez centímetros que se inflama, se puede romper y generar una peritonitis”, señaló.
En el caso de la expresidenta, Tartaglione explicó que “tal vez se le inflamó el apéndice y la parte de alrededor le generó una peritonitis, una inflamación del peritoneo, pero no llegó a romperse”, lo que permitió una resolución quirúrgica sin mayores consecuencias.
El médico subrayó que no es una patología exclusiva de personas con mala salud: “En una persona sana, que se alimenta bien y está en su peso ideal, puede ocurrir igual y a cualquier edad”, aunque aclaró que se observa con mayor frecuencia en quienes no consumen suficiente fibra o no se alimentan correctamente.
Síntomas, riesgos y cuándo consultar
Tartaglione explicó que el principal peligro aparece cuando la consulta médica se demora. “A veces los síntomas son claros, pero si llegás tarde podés tener una peritonitis, que es la bolsa que recubre el abdomen, y el riesgo puede ser muy importante, incluso hasta la muerte”, advirtió.
El dolor suele comenzar de manera difusa: “Se manifiesta con dolor en el ombligo, que luego se corre hacia el lado derecho. Comprimís y no duele, pero soltás y duele”, describió. A ese cuadro pueden sumarse náuseas, vómitos y malestar general, lo que muchas veces lleva a confundirlo con una gastroenteritis, una infección urinaria, cálculos renales, diverticulitis o incluso dolor ginecológico.
Por eso, el mensaje central del especialista fue claro: “Ante cualquier dolor abdominal que no pasa, consultá. Es mejor hacer una consulta de más”.

Cómo es la cirugía y el postoperatorio
En la mayoría de los casos, la apendicitis se trata mediante cirugía laparoscópica, una técnica mínimamente invasiva. “Se hacen cuatro o cinco agujeritos en el abdomen, se inyecta aire para inflar la panza y que el cirujano pueda trabajar. A través de una cámara se ve el apéndice, se corta, se coloca en una bolsita y se extrae”, explicó Tartaglione.
El postoperatorio, aseguró, suele ser leve. “Esto también sirve para sacar algunos mitos sobre el apéndice”, agregó. Durante muchos años se creyó que no cumplía ninguna función, pero hoy se sabe que está relacionado con el sistema inmunitario y actúa como reservorio de bacterias buenas.
Sobre el final de la entrevista, el cardiólogo remarcó que la apendicitis es la urgencia quirúrgica más común, y que incluso puede atravesar una primera etapa con pocos síntomas. “Tal vez al principio no sentís nada, pero después se manifiesta. Si no se trata a tiempo, realmente puede complicarse”, concluyó Tartaglione.
