La imagen habla por sí sola: una butaca del cine, visiblemente dañada, refleja un gesto de descuido que impacta no solo en el mobiliario, sino en el espíritu de una experiencia compartida.

Frente a esto, Cines Ocean lanza un mensaje claro y sentido: «Respetemos las salas y cuidemos el cine entre todos. Muchas gracias.»
El cine no es solo un espacio de entretenimiento; es también un lugar de encuentro cultural, comunitario y emocional. Cada persona que cruza sus puertas es parte de la vivencia colectiva que se genera allí. Por eso, preservar sus instalaciones es también una forma de valorar el arte, el trabajo y el disfrute de todos.
Este llamado público busca generar conciencia y promover el respeto por los espacios comunes. Como espectadores, cuidar el cine es también cuidar la posibilidad de seguir compartiendo historias que nos emocionan, nos hacen pensar y nos reúnen.