Durante esta tercera semana de septiembre, el tiempo ha sido plenamente veraniego, provocando que la vuelta a la rutina se haga un poco más cuesta arriba y sigamos acordándonos de los meses de julio y agosto con anhelo. Las máximas han alcanzado o incluso superado los 40 grados, especialmente en puntos de la mitad sur peninsular, provocando que los termómetros se situasen “entre diez y quince grados por encima de lo normal para esta época”.
Esto, sin embargo, está a punto de cambiar. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) alerta de que este sábado 20 de septiembre comenzará un “importante descenso térmico”, especialmente en Galicia y el Cantábrico occidental, que ya nos enviará de lleno al ambiente otoñal. Esta bajada de las temperaturas, que será notable durante esta jornada, aunque todavía moderado en el resto de la península y con pocos cambios en el área mediterránea, continuará y tendrá más presencia el domingo y el lunes.
Precisamente, en el inicio de la próxima semana, podremos encontrarnos valores “entre cinco y diez grados más fríos de lo normal para la época del año, sobre todo en la mitad norte”, según ha explicado Rubén del Campo, portavoz del organismo público. Así, la diferencia entre las temperaturas del pasado viernes y del próximo lunes pueden ser incluso de 15 grados, como se prevé que ocurra en ciudades como Bilbao, Vitoria o Pamplona.
Este sábado, además, lo que será especialmente notable es el aumento de la inestabilidad a consecuencia del avance de una vaguada que dejará lluvias y tormentas especialmente en la mitad norte y las zonas montañosas del este. En puntos del territorio como el Alto Ebro, los Pirineos, el sur de Aragón y el norte de la Comunidad Valenciana podrán ser “localmente fuertes y con granizo”.
Siete comunidades autónomas en alerta
Pasamos de los avisos amarillos y naranjas por altas temperaturas, que en los anteriores días han marcado el mapa del país, a los de lluvias y tormentas. Son siete las comunidades autónomas que presentan alertas este sábado a consecuencia de las fuertes precipitaciones, dos de ellas con “riesgo importante”.
En Aragón, Huesca y Zaragoza, y la Comunidad Foral de Navarra estarán desde las 17.00 horas en aviso naranja por acumulaciones de 30 mm en una hora y la probabilidad de granizo grande y rachas muy fuertes de viento. A estas se suman, en alerta amarilla, Teruel (Aragón); el Principado de Asturias; Cantabria; Burgos, León, Palencia y Soria (Castilla y León); Álava, Guipúzcoa y Bizkaia (País Vasco), y La Rioja.
La situación será similar el domingo, desplazándose la inestabilidad más hacia el este peninsular a consecuencia de esa vaguada que cruzará la península de oeste a este. Así, por el momento, la Aemet ha activado avisos por lluvias y tormentas en Aragón (Huesca, y Zaragoza), la Comunidad Foral de Navarra, la Comunidad Valenciana (Castellón y Valencia) y Cataluña, con riesgo importante en Barcelona y alerta amarilla en Girona, Lleida y Tarragona durante gran parte del día.
Este día, además, el descenso térmico se va a extender a la mayor parte de la península, a excepción del área mediterránea, donde incluso se prevé que puedan subir las temperaturas en algunos puntos del Mediterráneo y Baleares. “Se superarán los 34 grados, por ejemplo, en puntos de Mallorca, interior de la Comunidad Valenciana, Guadalquivir y provincia de Málaga”, explica Rubén del Campo, “pero en el tercio norte muchas localidades quedarán con una temperatura máxima de entre 18 y 20 grados como mucho”.
Ya el lunes será “un día otoñal”, incluso “con ambiente frío para la época del año” porque los valores continuarán bajando también en el este peninsular y en Baleares. “Ciudades como León, Ávila, Burgos, Vitoria, Pamplona, Santander, Segovia, Oviedo o Lugo alcanzarán temperaturas máximas de tan solo 16 a 18 grados y únicamente en Sevilla, Málaga, Córdoba o Murcia se alcanzarán los 30 grados”.