Un operativo policial desarticuló en la mañana de ayer jueves una fiesta clandestina que se promocionaba en redes sociales como una simple “degustación de vinos”. En el lugar, secuestraron diferentes tipos de drogas.
El evento, realizado en una salón de la localidad cordobesa de La Paisanita, convocó a más de 500 personas, en su mayoría jóvenes.
De acuerdo con lo informado por el portal El Doce.tv, la intervención se produjo pasadas las 8 de la mañana de ayer, cuando personal de la Policía de Córdoba, junto a fuerzas federales, irrumpió en el predio donde se desarrollaba lo que en realidad era una fiesta de música electrónica.
Según las autoridades, los organizadores habían presentado una habilitación vinculada a una actividad gastronómica, pero el tipo de evento, la cantidad de asistentes y el contexto general no se correspondían con el permiso otorgado.
“Lo que se vendía como una degustación resultó ser un encuentro masivo con DJ en vivo, luces, y circulación de sustancias ilícitas”, señalaron desde el Ministerio de Seguridad de Córdoba, encabezado por Juan Pablo Quinteros, quien supervisó el operativo personalmente.
Según confirmaron fuentes oficiales, los organizadores del evento exhibieron ante los efectivos una presunta habilitación para una actividad gastronómica. Sin embargo, el documento fue considerado incongruente con las características reales del evento.
“El evento fue disfrazado para eludir controles y regulaciones. Se detectó la presencia de un DJ, iluminación profesional, y venta de entradas a través de plataformas digitales, lo cual no se condice con una simple degustación de vinos”, explicó el jefe de Departamentales Sur, Comisario General Cristian Gómez.
En el lugar, se encontraban presentes también el jefe de la Departamental Santa María, Comisario Mayor Héctor Villagra, personal de la Brigada de Investigaciones, y efectivos de la Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA) y de la Policía Federal Argentina, quienes llevaron adelante controles simultáneos durante el procedimiento.
En la inspección, los agentes realizaron controles exhaustivos en busca de estupefacientes. Como resultado, se secuestraron dosis de cocaína, marihuana y pastillas de éxtasis, las cuales se encontraban en poder de algunos de los asistentes, pero no se precisó si se registraron detenciones en el lugar.
Días atrás, en un operativo conjunto entre la Municipalidad de la ciudad de Córdoba y la Policía provincial, fue desbaratada una peña clandestina que se desarrollaba sin ningún tipo de habilitación en la capital cordobesa.
La intervención se llevó a cabo en una vivienda ubicada en calle Idelfonso Muñecas al 4.400, en el barrio Coronel Olmedo, donde se registraba la presencia de alrededor de 450 personas.
El evento, que contaba con música en vivo, se realizaba sin autorización municipal, lo que motivó la inmediata intervención de las autoridades.
Según informó la Policía de Córdoba, los inspectores municipales constataron que el sitio no contaba con los permisos necesarios ni medidas mínimas de seguridad, por lo que se procedió a la evacuación del lugar y se labraron actas de infracción.
En total, se aplicaron dos multas que ascienden a 8 millones de pesos, conforme al Código de Convivencia Municipal.
A fines del mes de marzo pasado, otra fiesta clandestina con más de 700 asistentes fue desarticulada en Villa Revol, barrio ubicado también en la capital cordobesa.
El operativo fue llevado a cabo por efectivos de la Policía de Córdoba en coordinación con personal del Área de Fiscalización y Control de la Municipalidad, quienes constataron que el evento se realizaba sin habilitación ni condiciones mínimas de seguridad.
La intervención se produjo en una vivienda ubicada en calle Los Incas al 2500, donde se había montado un evento masivo sin ningún tipo de autorización. Al momento de la inspección, se encontraban centenares de personas dentro de la propiedad y en su perímetro, en lo que parecía una fiesta organizada de manera deliberada y con amplia convocatoria.
Las autoridades dispersaron a los presentes, quienes se retiraron del lugar sin registrar incidentes ni enfrentamientos con los agentes. Posteriormente, el inmueble fue clausurado por el personal municipal.
Según detallaron desde la Municipalidad de Córdoba, la vivienda en cuestión no contaba con ningún tipo de permiso para realizar eventos públicos o privados de gran escala. Tampoco presentaba condiciones básicas de seguridad, como salidas de emergencia, extinguidores o presencia de personal médico.
Los organizadores no fueron identificados. Sin embargo, se labraron actas de infracción y se inició una investigación para determinar la responsabilidad de los propietarios o arrendatarios del inmueble. La Municipalidad no descartó aplicar sanciones económicas.