
El hermano de la trabajadora arrestada también fue implicado tras comprobarse que había utilizado documentación falsa para registrar a su nombre un vehículo perteneciente al matrimonio afectado. Esta información fue confirmada por la Jefatura Superior de Policía de Madrid y difundida por varios medios, entre ellos la propia policía a través de un comunicado. Según informó la Policía Nacional, ambos fueron detenidos en Alcorcón tras concluir una investigación que se prolongó desde finales de agosto y que reveló una serie de delitos continuados de estafa y falsificación documental.
De acuerdo con la información publicada por la Policía Nacional, la investigación se originó cuando una mujer de edad avanzada acudió en compañía de su actual cuidadora a presentar una denuncia tras detectar movimientos irregulares en sus cuentas bancarias. La denunciante explicó que, tras el fallecimiento de su marido, observó que se habían realizado numerosas compras y extracciones de efectivo no autorizadas con las tarjetas asociadas a las cuentas que compartía con su esposo. Las operaciones dudosas se habrían iniciado en abril de 2024, mes coincidente con la muerte del titular de las cuentas, quien, según detalló la afectada, se encargaba de la gestión económica de la familia.
Según reportó la Jefatura Superior de Policía de Madrid, la cuidadora aprovechó la situación de confianza y vulnerabilidad de la víctima para solicitar, sin su consentimiento, nuevas tarjetas bancarias a su nombre en varias entidades financieras. De esta forma, la empleada habría accedido libremente al domicilio familiar y a documentación privada, lo que le permitió proseguir con la maniobra fraudulenta a lo largo de más de dos años. Durante este periodo, la investigada realizó operaciones de extracción de dinero en cajeros automáticos, además de compras en distintos establecimientos comerciales, incluyendo el pago de paquetes turísticos tanto en España como en el extranjero, logrando un perjuicio económico a la víctima próximo a los 110.000 euros.
El mismo operativo permitió verificar que el hermano de la empleada también había incurrido en un delito, ya que según consignó la Policía Nacional, presentó documentación falsa en la Oficina de Tráfico para hacerse con la titularidad de un vehículo propiedad del matrimonio perjudicado. Los agentes comprobaron la veracidad de estos hechos durante el curso de su investigación y procedieron a la detención de ambos implicados el 21 de noviembre, poniéndolos a disposición judicial acusados de la comisión de delitos continuados de estafa y falsificación documental.
El medio policial detalló que este tipo de delitos, que combinan abuso de confianza, manipulación y acceso no autorizado a bienes o documentación privada de personas mayores, forman parte de una casuística creciente que afecta especialmente a colectivos en situación de vulnerabilidad. Desde la Policía Nacional se ha insistido en la importancia de las campañas de prevención y concienciación, llevadas a cabo bajo el Plan Mayor-Seguridad, uno de cuyos objetivos principales consiste en formar al colectivo de personas mayores y su entorno cercano, alertando sobre los riesgos de sufrir fraudes similares.
La Policía Nacional, según reportó la Jefatura Superior, realiza de manera regular acciones informativas en asociaciones y centros de mayores en distintos puntos del país, proporcionando pautas y consejos para minimizar el impacto de esta modalidad delictiva. En estas charlas, los especialistas en Participación Ciudadana explican cómo reconocer indicios de abuso, a quién acudir ante sospechas y cómo proteger los bienes y el patrimonio personal mediante el uso seguro de medios de pago y documentos oficiales. La institución insiste en la necesidad de extremar la cautela en todo lo referente al entorno financiero y la gestión documental, recomendando que las personas mayores confíen estos aspectos únicamente a familiares de máxima confianza o a profesionales debidamente acreditados.
En el caso investigado en Alcorcón, tanto el proceso de detección inicial como la colaboración entre la víctima y las fuerzas policiales resultaron claves para poder esclarecer los hechos y proceder a la detención de los sospechosos. Según relató la Policía Nacional, la colaboración ciudadana y la información facilitada por las asociaciones de mayores han permitido destapar otros casos similares en distintas zonas del país, consolidando una tendencia de investigación activa frente a la criminalidad que afecta a este segmento de la población.
La investigación, según detalló la Policía Nacional, prosiguió con la obtención y análisis de documentación bancaria, el rastreo de pagos en comercios, la revisión de grabaciones de cajeros automáticos y la comprobación del uso y disfrute de bienes muebles pertenecientes a la víctima. Asimismo, la policía resaltó la importancia de establecer dispositivos de vigilancia y realizar una actuación coordinada para proceder a la detención de los presuntos autores en el momento adecuado, asegurando la integridad de la víctima y la preservación de las pruebas necesarias para el proceso judicial.
El caso de Alcorcón se sitúa en la serie de investigaciones orientadas a combatir la economía delictiva vinculada a la manipulación de mayores y la apropiación de bienes personales bajo engaño, uno de los fenómenos detectados en el mapa de delitos contra el patrimonio que las fuerzas de seguridad investigan de forma prioritaria, según informaciones suministradas por la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
