Novak Djokovic, profesional desde 2003, es el máximo campeón de Grand Slams (24 trofeos). Ostenta, en total, cien títulos (ganó el último en mayo, en el ATP 250 de Ginebra). Posee el récord de semanas como número 1 (428) y cuenta con la mayoría de los registros positivos que andan dando vueltas en el circuito. Tiene 38 años y cuatro meses. Es una leyenda del deporte. Así y todo, sigue teniendo hambre. Quiere más. Y desafía a las nuevas generaciones.
En Shanghái, el serbio superó dificultades físicas y el agobio de un clima sofocante (80% de humedad), derrotó a un rival diez años menor, el español Jaume Munar (41°), por 6-3, 5-7 y 6-2, en dos horas y 41 minutos. De esa manera, se encumbró como el tenista más veterano en alcanzar los cuartos de final de un Masters 1000, la categoría más importante luego de los Grand Slams. Su próximo rival será el belga Zizou Bergs (44° y 26 años, eliminó a Francisco Cerúndolo en la tercera ronda), que batió al canadiense Gabriel Diallo (31° cabeza de serie) por 3-6, 7-5 y 7-6 (10-8), en 2h48m.
El colapso de Djokovic
Con Carlos Alcaraz (1°), Jannik Sinner (2°), Alexander Zverev (3°) y Taylor Fritz (5°) fuera del certamen chino, a Djokovic se le abre una gran oportunidad de volver a conquistar un Masters 1000 después de dos temporadas: el último fue en París-Bercy, en 2023. Máximo campeón histórico en Shanghai, con cuatro trofeos, Nole escribió un nuevo capítulo de resiliencia. Sacó adelante un desafío espinoso, ante un rival envalentonado; se lo vio agitado y hasta fue asistido varias veces por problemas en la pantorrilla derecha. Utilizó toallas con hielo en los cambios de lado, vomitó en diferentes ocasiones al costado de la cancha y cayó exhausto al suelo tras perder el segundo set. Pero lo sacó adelante.
En un cuadro totalmente abierto, Djokovic sigue buscando registros positivos en los Masters 1000. Es el jugador con más victorias en la categoría (417), títulos (40), finales (60) y semifinales (79). El balcánico se afianza como número 3 en la carrera al Masters de Turín y coquetea su 18° clasificación al torneo, las ATP Finals, donde también es el máximo campeón histórico, con siete trofeos. Mantiene más de 1500 puntos de ventaja sobre la novena plaza que tiene el canadiense Felix Auger-Aliassime, el jugador que marca el corte de acceso directo en estos momentos.
“Un día duro en la oficina. Muy exigente físicamente. Por suerte, cuento con el mayor apoyo del mundo”, escribió Djokovic en sus redes sociales. En China es venerado. Durante estos días, los espectadores locales lo homenajearon de una forma creativa e impactante desde el aspecto visual. Los fans chinos lucieron posters de la vida de Djokovic y de sus logros en forma cronológica, formando una suerte de mural. Nole suele hacerle guiños simpáticos al público local, hablando en chino mandarín o firmando en la cámara con caracteres chinos.
Por otro lado, el danés Holger Rune busca su lugar en las ATP Finals y una gran actuación en Shanghai es todo lo que necesita para lograrlo. Llegó a los cuartos de final en el Masters 1000 asiático, confirmando su capacidad para acelerar en el tramo final de la temporada. En un partido de márgenes estrechos, derrotó por 6-4, 6-7 (5-7) y 6-3 al gran sacador francés Giovanni Mpetshi Perricard.
Actualmente en el 12° lugar de los que aspiran a jugar el Masters, Rune se postula como un fuerte candidato en la parte baja del cuadro de Shanghai. El escandinavo disputará los cuartos de final ante el ganador del partido entre Valentin Vacherot (Mónaco) y Tallon Griekspoor (Países Bajos).
Este miércoles, por la parte alta del cuadro, por los octavos de final, se medirán Arthur Rinderknech (Francia) vs. Jiri Lehecka (Chequia, 15°), Nuno Borges (Portugal) vs. Alex De Miñaur (Australia, 7°), Auger-Aliassime (12°) vs. Lorenzo Musetti (Italia, 8°) y Learner Tien (EE.UU.) vs. Daniil Medvedev (Rusia, 16°).