Los dólares legales -el oficial y los financieros– se tomaron un respiro hoy al detener la carrera alcista que venían ensayando sostenidamente en las últimas semanas. Fue luego de una nueva incursión oficial en el mercado de futuros cambiarios en la parte final de la rueda, cuando en esa plaza se validaban precios de $1302 y $1344 para los contratos con vencimiento a fin de este mes y de agosto, respectivamente.
La jugada oficial, que los llevó a cerrar en $1284 (-0,85%) y $1325 (-0,56%), y la nueva escalada de las tasas de interés cortoplacistas en pesos resultaron claves para esa reversión. El dólar mayorista vendedor, que había llegado a tocar los $1294, terminó el día en $1275, mientras que los financieros, que operaron en máximos de $1298 (MEP) y $1304 (Contado con Liquidación), se replegaron a $1281,30 y $1289,70, respectivamente.
En ese marco, basta ver que la tasa de la caución a 1 día cerró en 55% anual -tras alcanzar un pico de 66,7%, cuando venía de niveles de 37,5%-, y la a 7 días finalizó en 46,01% anual, luego de operar al 70,5%, frente al 30,5% del viernes. A su vez, el rendimiento de la Letra de Capitalización (Lecap) más corta -la S31L5, que vence en 10 días- se acercó al 60% anual, “en torno al 4% efectivo mensual y muy por encima de la inflación esperada de menos del 2%“, destacó el analista Javier Giordano, de CFA.
Para los operadores, la señal oficial y el llamado «efecto codicia» por captar tasas altas se combinaron para aplacar al dólar, excepto el blue, que subió otros $20 y cerró a $1325 (+1,53%), su tercer valor más alto del mes, solo por detrás de los cierres de $1340 y $1330 registrados el martes y miércoles de la semana pasada.
La duda es qué puede ocurrir de aquí en adelante, especialmente porque mañana concluye el plazo para que los exportadores liquiden las ventas de granos declaradas antes del vencimiento de la rebaja en las retenciones. Además, se sabe que el registro de Declaraciones Juradas (DDJJ) de esas ventas, que explotó en las últimas semanas de junio, hoy está claramente ralo.
Todo esto ocurre en un contexto en el que la deficiente praxis oficial, con la eliminación de las Letras Fiscales de Liquidez (LEFI), liberó pesos al mercado. “Lo que tiene registrado el agro para exportar después del 2 de julio es poco y nada: 15.000 toneladas de poroto de soja, algo de harina de soja, un poco más de aceite de soja y algunos puchitos de cebada y harina de trigo. En total, apenas más de US$200 millones. ¿Es raro? No, porque vamos a cerrar un julio récord de exportaciones. Es lógico que, tras dos meses con altos volúmenes de venta, las empresas hayan cubierto su cuota de exportaciones prevista, que en condiciones normales hubieran distribuido en cuatro meses en lugar de dos“, explicó el analista del mercado granario Javier Preciado Patiño.
A partir del 2/7 con el 33% de DEx desaparecieron las DJVE de poroto de #soja. Hay algo de harina y aceite que suman unos US$170 millones. Quedan 10 días hábiles, pero no hay perspectiva de cambio.Lo que se ingrese en julio va a ser el remanente del hot sale de junio. pic.twitter.com/CeLTi8sLAF
— Javier Preciado Patiño (@jpreciadopatino) July 17, 2025
“Seguramente hoy aparezca el remanente que queda, y después se verá, porque hay que recordar que se volvió al régimen anterior, que permite anticipar el pago de retenciones, pero deja la obligación de liquidar 15 días después de la exportación. Eso no permite visualizar con claridad el tamaño de la oferta futura, pero todo indica que agosto y septiembre serán meses con pocas ventas“, concluyó.
Este dato no es menor, teniendo en cuenta que el sector cerealero es el principal y más regular aportante de divisas al mercado cambiario oficial. Por eso, una disminución previsible de su oferta, en momentos de demanda sostenida por importaciones “estimuladas”, gastos por vacaciones en el exterior y búsqueda de coberturas preelectorales, genera inquietud sobre un posible desequilibrio del mercado cambiario, que presione aún más al dólar local al alza.
Hoy la caución a 1 día empezó a operarse en la zona del 34% de TNA. Cerca del cierre de la rueda saltó al 63%. Ahora está en el 65%.
No agrada mucho esta dinámica de falta de pesos y tasas voladas. https://t.co/pB9Ekhl6mn pic.twitter.com/3OQl8KpEg5
— Damian Brik (@eldaminato) July 21, 2025
“Solo en lo que va de julio, el agro ya liquidó más de US$3000 millones. Es probable que eso baje a un promedio de US$100 millones diarios“, estimó el economista Amílcar Collante, del Centro de Estudios del Sur (CeSur). “Ahora, una menor liquidación de agro-dólares, en medio del desarme desordenado de las LEFI, va a exigir tasas de interés altas en el corto plazo, y eso impactará en el crédito, que hasta ahora venía apalancando la recuperación económica“, concluyó.
“Sin duda vamos a pasar, en pocos días, de un promedio de US$250 millones por día a otro muy inferior, a menos que aparezcan estímulos de precios que alteren las proyecciones actuales. Eso le pondrá presión alcista al dólar, aunque es esperable que la oferta también se modere. La clave estará en el nivel de tasas de interés necesario para equilibrar el mercado: si será el actual, que ya es alto, o uno aún mayor», opinó el economista Martín Polo.
“Frente a una etapa de menor afluencia de agrodólares, con los comicios más cerca y reservas que se van incrementando a cuentagotas, el escenario buscando el techo de la banda tiene un 50% de probabilidad de ocurrencia. Pero siendo que el claro objetivo de las autoridades es el de calma cambiaria y desinflación, y que pusieron en juego diversas herramientas con dicho fin, el escenario del Gobierno (40%) tampoco puede descartarse. En ese caso, el deslizamiento del tipo de cambio oficial se calma, bajo el supuesto de mayor acumulación de dólares por diversas vías. En definitiva, estamos presenciando una mayor volatilidad e incertidumbre y ambos escenarios siguen vigentes», plantearon en un informe desde Fundación Capital.
El nivel de tasas no será inocuo: producto del desarme de las LEFI, el Tesoro Nacional pasó a acumular vencimientos de deuda en pesos con el sector privado por al menos $33 billones en menos de 45 días.