Electronic Arts (EA), uno de los mayores editores de videojuegos del mundo, está en negociaciones avanzadas para ser adquirida por un consorcio de inversores en una operación valorada en aproximadamente USD 50.000 millones, según reportó Wall Street Journal.
De concretarse, esta compra apalancada se convertiría en la mayor de la historia, marcando un hito tanto para el sector tecnológico como para el financiero. Entre los actores clave que negocian el acuerdo figuran el fondo de inversión Silver Lake, el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudita (PIF) y Affinity Partners, la firma liderada por Jared Kushner.
El acuerdo, que podría anunciarse oficialmente tan pronto como el próximo lunes, supondría la salida de EA de la bolsa y su paso a manos privadas. La valoración de la empresa, que antes de la noticia rondaba los USD 42.000 millones, experimentó un alza de casi el 15% tras conocerse las negociaciones, situando su capitalización en torno a los USD 48.000 millones. La magnitud de la operación supera ampliamente el récord anterior de USD 31.800 millones establecido por la compra de TXU en 2007, lo que subraya el alcance sin precedentes de la transacción.
Inversores detrás de este movimiento
El grupo de inversores que lidera la operación reúne a algunos de los nombres más influyentes del capital global. Silver Lake, reconocido por su historial en adquisiciones tecnológicas de gran escala y su participación en empresas como Unity, aporta su experiencia en el sector.
Por su parte, el PIF saudí, a través de su brazo de videojuegos Savvy Games Group, ya posee el 10% de EA y ha realizado inversiones significativas en compañías como Nintendo y desarrolladores como Scopely.
Affinity Partners, dirigida por Jared Kushner, cuenta con respaldo financiero de fondos de Arabia Saudita, Qatar y Emiratos Árabes Unidos, según Reuters. La posible entrada conjunta de estos actores consolidaría una alianza de capitales estadounidenses y de Oriente Medio con fuerte proyección en el entretenimiento digital.
El contexto en el que se produce esta negociación es especialmente relevante para la industria del videojuego. El sector enfrenta actualmente un aumento sostenido de los costos de desarrollo, una competencia cada vez más intensa y la presión de consumidores que exigen productos de alta calidad.
EA, editora de franquicias emblemáticas como “FC”, “Madden NFL” y “Battlefield”, había pronosticado en julio resultados por debajo de las expectativas de Wall Street, lo que reflejaba los desafíos del mercado. Sin embargo, la compañía apuesta por el lanzamiento inminente de “Battlefield 6”, previsto para el próximo mes, como un motor para impulsar sus ingresos y competir directamente con títulos como “Call of Duty” de Activision Blizzard, según ambas fuentes.
Reacciones del mercado y próximos pasos
El mercado ha reaccionado con expectación ante la posible adquisición. Las acciones de EA subieron más del 15% tras conocerse las negociaciones, según Reuters. La operación, de confirmarse, no solo redefiniría el mapa de la industria del videojuego, sino que también establecería un nuevo estándar para las compras apalancadas a nivel mundial. El precedente más cercano, la adquisición de TXU en 2007, queda muy por detrás en términos de valor absoluto, lo que subraya la magnitud de la apuesta de los inversores.
En cuanto a los próximos pasos, las fuentes consultadas por Wall Street Journal anticipan que el anuncio oficial podría producirse en cuestión de días, posiblemente el lunes siguiente. Los detalles finales sobre la participación de cada fondo y la estructura del acuerdo aún se encuentran en negociación, mientras el sector y los mercados financieros permanecen atentos a la confirmación de la mayor compra apalancada de la historia.
Para Arabia Saudita, la adquisición de EA representaría mucho más que una inversión financiera: consolidaría a los videojuegos como un pilar estratégico de su proyección cultural y de influencia global, al nivel de industrias como el deporte o el cine.