El acuerdo comercial entre la Argentina y Estados Unidos

admin

La llegada de Peter Lamelas, nuevo embajador de los Estados Unidos ante la Argentina, ha despertado la expectativa de avanzar en un amplio acuerdo comercial entre ambos países. Este ha sido un tema conversado en los encuentros entre los presidentes Donald Trump y Javier Milei ocurridos con motivo del apoyo financiero del Tesoro estadounidense concretado en octubre pasado, y el canciller Pablo Quirno viajará hoy a Washington para avanzar en el acuerdo, al tiempo que el embajador argentino Alec Oxenford aseguró que solo resta “ponerle el moño”.

Algunas decisiones del gobierno norteamericano mostraron la clara intención de ampliar el apoyo a nuestro país por considerarlo como un faro en la región. Así debe entenderse la ampliación de la cuota de importación de carne argentina de 20.000 a 80.000 toneladas anuales con un arancel preferencial del 10%. Los aumentos en las tarifas de importación que utiliza Trump como arma de presión en su política exterior ya habían mostrado para nosotros un trato mejor y diferenciado. De ahí que la expectativa de llegar a un acuerdo de libre comercio se ha hecho más verosímil.

La apertura externa es parte de la plataforma que ya estaba expuesta por el presidente Milei en su campaña hacia la presidencia de la Nación. El décimo punto del Pacto de Mayo afirma la necesidad de “sostener la apertura al comercio internacional, de manera que la Argentina vuelva a ser una protagonista del mercado global”. Este postulado se apoya en el convencimiento de que la ampliación del comercio potencia el aprovechamiento de las ventajas comparadas y mejora la productividad.

El décimo punto del Pacto de Mayo afirma la necesidad de “sostener la apertura al comercio internacional, de manera que la Argentina vuelva a ser una protagonista del mercado global”

Han pasado veinte años desde el lamentable episodio del maltrato al presidente George W. Bush por parte de Néstor Kirchner y otros líderes de izquierda en el evento convocado como Cumbre de las Américas en Mar del Plata en 2005. La propuesta de Bush era, justamente, la conformación del Área de Libre Comercio para las Américas (ALCA). El rechazo de Brasil, gobernado entonces por Lula da Silva, sumado a los de la Argentina con Kirchner y Venezuela con Hugo Chávez, dieron por tierra con aquella propuesta. Quien en aquel momento era presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, también tenía una posición negativa, aunque estaba moderada por la de su ministro de Economía, Danilo Astori. Chile ya gozaba de una economía abierta y exitosa, apoyada en varios tratados de libre comercio, y México ya estaba integrado al NAFTA con los Estados Unidos y Canadá. La oportunidad se perdió y no ha vuelto a estar explícitamente disponible hasta hoy, tal vez.

La pertenencia de nuestro país al Mercosur tiene implicancias que deberán considerarse en caso de que progrese un acuerdo de libre comercio de la Argentina con los Estados Unidos. Nos referimos a la posibilidad de suscribir un tratado bilateral fuera del Mercosur. Sería necesario respetar las normas del Acuerdo de Asunción, o bien lograr el consenso para modificarlas. Hay dudas de que esto pueda lograrse en la actual coyuntura. Ha habido momentos en años pasados en que una iniciativa de este tipo hubiera contado con el acompañamiento de una mayoría de los países miembros. El presidente uruguayo Luis Lacalle Pou lo propugnaba y contaba con el apoyo de Paraguay. La posición de Brasil ha sido en general resistente a la apertura, aunque con intensidades diferentes desde Jair Bolsonaro a Lula. No está en su cultura económica y empresarial la vocación de relacionarse mediante acuerdos de libre comercio.

No se plantean las mismas dificultades cuando es el propio Mercosur el que suscribe acuerdos cumpliendo con el mecanismo estatutario de la aprobación de sus integrantes. Así es como se ha avanzado en el acuerdo con la Unión Europea en una asociación comercial y estratégica. No llega a ser un tratado de libre comercio, pero sí un gran avance en un proceso continuo de apertura. En este contexto todo lo que se logre avanzar en el plano comercial con los Estados Unidos debe ser muy bienvenido.

Facebook Comments Box

Deja un comentario

Next Post

Elogio del esfuerzo

“…No entender fue mi experiencia primera y definitiva. Comencé no entendiendo y, casi enseguida, acepté que ese era el punto de pasaje a todo lo que valía la pena. Comprendí que entender era un trabajo, me acostumbré a que ese trabajo fuera un placer. Ni el camino del arte ni […]
error: Content is protected !!