(Actualiza la EC3243 con datos al cierre del mercado)
Madrid, 28 may (EFECOM).- El BBVA y el Banco Sabadell han terminado la sesión bursátil de este miércoles con caídas un día después de que el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, haya elevado la oferta pública de adquisición de acciones (opa) al Consejo de Ministros.
Las acciones de ambas entidades abrieron la sesión bursátil con moderadas subidas, pero después de dos horas giraron a la baja para terminar en negativo.
El BBVA, el valor más bajista del IBEX 35, se ha dejado un 2,24 %, hasta 13,24 euros por acción, mientras que los títulos del Sabadell han cerrado en los 2,77 euros, tras perder un 1,18 %.
En lo que va de año, el Sabadell se revaloriza en bolsa un 54,53 % y el BBVA un 45,66 %.
Con la cotización actual, la prima que el BBVA ofrece para hacerse con el Sabadell sigue siendo negativa, del 5,92 %, lo que se traduce en que los accionistas del banco catalán estarían perdiendo 885 millones si pudieran aceptar en estos momentos la oferta de canje.
Según el analista de mercados Javier Cabrera, las caídas de hoy en bolsa de ambas entidades «parecen responder a la tendencia general del mercado y no a la decisión de Carlos Cuerpo».
En la víspera, Cuerpo anunció que elevaba al Consejo de Ministros del BBVA sobre el Banco Sabadell tras llevar a cabo su propio análisis y después de que cinco ministerios del ámbito económico así lo solicitaran.
El BBVA planteó hace más de un año su oferta a los accionistas del Sabadell con la idea de hacerse con el control de la entidad catalana e incorporarla a su grupo, pero necesitaba el visto bueno, entre otros, del Banco Central Europeo (BCE), la CNMC y la CNMV.
Para el analista de Bankinter Rafael Alonso la probabilidad de éxito de la OPA es reducida si BBVA no mejora la ecuación de canje.
La contraprestación ofrecida por el BBVA a los accionistas del Banco Sabadell es el pago de 70 céntimos y una acción nueva por cada 5,345 acciones del grupo catalán.
Según el analista de IG Sergio Ávila, ahora están en juego aspectos como el empleo, la inclusión financiera y la cohesión territorial.
Además, añade que tras dejar la Comisión Europea claro que no ve motivos para bloquear la operación, ello pone presión sobre Moncloa para que su decisión sea coherente con los criterios comunitarios. EFECOM