El CE Europa ha comunicado que la obligatoriedad de jugar en un campo con césped natural representa, según su directiva, un perjuicio deportivo, social y económico para la entidad, al impedirle utilizar su estadio habitual, el Nou Sardenya, durante la presente temporada. La resolución judicial de la Audiencia Nacional, que ratifica la aplicación de la normativa de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) sobre los requisitos de la superficie de juego, fuerza al equipo catalán a trasladarse al estadio de Can Dragó a partir del 15 de enero para sus partidos como local, según informó el medio.
De acuerdo con el reporte, la sala de lo Contencioso-Administrativo (Sección Sexta) de la Audiencia Nacional rechazó la petición de medidas cautelares planteada por el CE Europa, lo que imposibilita, de forma provisional, el uso del Nou Sardenya hasta el final de la temporada en curso. La resolución judicial se basa en el incumplimiento del requisito de disponer de césped natural en el estadio propio, en línea con lo estipulado en la Circular 99 de la RFEF. La federación estableció, según publicó el medio, la obligatoriedad para los clubes de disponer de este tipo de superficie a partir de la temporada 2025/26, concediendo un plazo hasta el 15 de enero de 2026 para equipos recién ascendidos.
El club intentó frenar la aplicación de esta norma acudiendo primero al Consejo Superior de Deportes y, ante la negativa, recurrió a la Audiencia Nacional, argumentando que la Circular 99 afecta el acceso a las competiciones oficiales y, por tanto, constituye un reglamento de carácter público, pese a que la RFEF la considere una medida interna. Tal como detalló la fuente, la postura del CE Europa subraya que la exigencia de césped natural es, en su opinión ante el tribunal, selectiva y desproporcionada. En sus alegaciones, la entidad denunció que la medida carece de fundamento objetivo para evitar la celebración de partidos de competición en sus instalaciones y recalcó que la FIFA autoriza la utilización de césped artificial homologado en torneos de máximo nivel, como la Copa del Rey o la Liga de Campeones, lo que revela discrepancias sobre la seguridad y validez de estas superficies.
El procedimiento judicial todavía continúa, según reflejaron las fuentes, aunque la negativa inicial a las medidas cautelares ya obliga al club a cambiar de estadio para los partidos de su plantilla principal. El CE Europa ha asegurado, en comunicaciones citadas por el medio, que persistirá en las acciones legales oportunas para tratar de revertir la situación y defender sus derechos hasta agotar todas las vías legales disponibles.
El club, en colaboración con el Ayuntamiento de Barcelona, se encuentra adaptando el estadio de Can Dragó para albergar sus próximos encuentros como local, como indicó el medio. Esta sede alternativa comenzará a utilizarse por el primer equipo masculino a partir de la segunda quincena de enero. Se prevé que la entidad traslade en breve información adicional a su afición respecto a los cambios logísticos derivados del traslado, contemplando factores operativos y de asistencia a los partidos.
La disposición de la Audiencia Nacional solo afecta al primer equipo, de acuerdo con los términos señalados por el medio. El resto de los equipos de la entidad no se ve afectado directamente por la medida, que responde al incumplimiento específico del requisito federativo relativo al tipo de superficie de juego en la competición profesional para la que participa el CE Europa.
