Madrid, 26 may (EFECOM).- El consumo energético de la industria extractiva y manufacturera española se desplomó un 36,9 % en 2023, hasta suponer un gasto de 15.548 millones de euros, debido, en gran parte al descenso de los precios de la energía tras el encarecimiento registrado el año anterior.
Así se desprende de los datos publicados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que explica que el consumo energético se refiere a los productos adquiridos para ser utilizados como combustible en el proceso productivo, cuantificados en términos monetarios y a precios corrientes.
Los principales productos energéticos que se utilizaron fueron la electricidad (54,7 % del total) y el gas (32,9 %), mientras que el uso de productos petrolíferos como combustible representó un 6,7 % del total.
Y en comparación con el año anterior, el consumo del sector en electricidad disminuyó un 40,6 %, el gasto en gas cayó un 33,4 % y el de productos petrolíferos un 10 %.
Por áreas de actividad, las que consumieron más energía fueron la alimentación (con 2.896 millones de euros y un 18,6 % del total), la fabricación de otros minerales no metálicos (con 2.185 millones y un 14,1 %) y la metalurgia o fabricación de productos de hierro, acero y ferroaleaciones (con 2.156 millones, un 13,9 %).
En el lado opuesto, las actividades con menor consumo fueron la industria del tabaco, la confección de prendas de vestir y la fabricación de productos informáticos, electrónicos y ópticos.
El consumo energético representó el 3,1 % del total de las compras de bienes y servicios (compras, trabajos realizados por otras empresas y servicios exteriores) realizado por la industria en el año 2023, frente al 4,6 % de 2022.
Y por comunidades autónomas, las que registraron mayor consumo energético industrial fueron Cataluña (con el 20,3 % del total nacional), la Comunidad Valenciana (14,2 %) y Andalucía (11,7 %).
Por el contrario, las Islas Baleares (0,2 %), Canarias (0,5 %) y La Rioja (0,8 %) fueron las que menos consumieron. EFECOM