La primera edición del Mundial de Clubes de la FIFA llega a su fin y más allá de los grandes encuentros que entregó el torneo, con equipos de distintas confederaciones jugando entre sí, hubo tiempo para crear un poco de arte relacionado al fútbol. Cole Palmer y Ousmane Dembelé protagonizaron una épica foto en la cima del Rockefeller Center en Nueva York en la previa al partido decisivo que se juega hoy a las 16 (horario Argentina).
El Chelsea, de Inglaterra, y el París Saint-Germain, de Francia, se medirán en una final de alto vuelo para ver qué equipo es el mejor del mundo. Antes de que ruede la pelota, desde la FIFA decidieron inmortalizar a los dos delanteros recreando la mítica foto “Lunch atop a Skyscraper”, la famosa imagen de los obreros comiendo el almuerzo en una viga de los rascacielos de Nueva York.
Para la réplica de una de las fotos más emblemáticas del siglo XX, Palmer y Dembélé ascendieron hasta la parte superior de la plataforma de observación en el edificio principal del Rockefeller Center. Como era de esperarse, la imagen de los dos talentosos futbolistas recorrió el mundo y empezó a estar en boca de todos los fanáticos del fútbol.
En un video que comenzó a circular en redes sociales se pudo ver el detrás de escena de la sesión fotográfica. Primero, se vio como ambos jugadores se suben a la viga, que comienza a elevarse varios metros sobre el suelo, para dar esa sensación de que están sobre el risco.
Ante la gran vista panorámica, los jugadores se dieron vuelta para ver Nueva York desde arriba. Cabe recordar que ese mirador está ubicado en un piso 70, a unos 260 metros de altura, lo que permite tener una visión privilegiada de una de las ciudades más lindas del mundo.
DAZN, una de las plataformas de streaming que transmitió el Mundial de Clubes de forma gratuita, también mostró detalles del cruce de las figuras del Chelsea y PSG. En un video subido a sus redes sociales, se apreció como Palmer y Dembelé se saludan con un beso antes de subir a la viga.
Se vio a Palmer caminando con la remera azul característica de su equipo y el número “10″ en la espalda por el edificio histórico junto a sus colaboradores. Luego se sientan con Dembelé en la plataforma, mientras una persona de producción les explica como se tomarán las fotos.
En la primera toma, los jugadores posan con el trofeo en el medio y luego con una pelota cada uno en las manos. Al final del video compartido por el canal de streaming, se ve a Palmer tomándose la misma foto pero con sus amigos.
El Rockefeller Center es uno de los íconos arquitectónicos y culturales más importantes de Estados Unidos y su construcción se llevó a cabo durante la Gran Depresión de los años 30, una época de severa crisis económica. Por eso, una vez finalizado el complejo se convirtió en un emblema de “trabajo, esperanza e innovación”.
Dembelé y Palmer hicieron una recreación de la célebre fotografía del siglo XX “Lunch atop a Skyscraper”. La imagen original data de 1932, donde se ve a 11 obreros involucrados en la edificación de una parte del Rockefeller Center, que descansan sobre una viga de acero en el piso 69, a más de 200 metros de altura. En sus manos, como era habitual, tenían un diario neoyorquino y un sandwich del almuerzo.
La imagen capturada desde la cima del Rockefeller Center, en Nueva York, ofrece una vista panorámica de Manhattan. Ese sitio está cargado de significado para los estadounidenses y el uso de la viga posee un valor simbólico.
La próxima foto épica que resta ver es la de Dembelé o Palmer con el trofeo del Mundial de Clubes en sus manos. La primera edición de este torneo, que fue un éxito deportivo y comercial, catapultará a Chelsea o PSG como el mejor equipo del mundo por los próximos años. La expectativa por consagrarse es mayúscula, mientras los argentinos hacen fuerza para que Enzo Fernández, único compatriota en la competición, pueda ganar una estrella más en su carrera.