Madrid, 28 may (EFE).- El egipcio Ali Farag, actual número dos del mundo de squash y quien encabezó la clasificación durante seis años, anunció este miércoles su retirada del circuito profesional de manera inmediata para emprender una nueva etapa en su vida y dedicarle más tiempo a su familia.
Farag, de 33 años, dio a conocer el final de su carrera en un mensaje en sus redes sociales menos de dos semanas después de perder la final del Mundial de squash de Chicago (Estados Unidos) ante el actual número uno, su compatriota Mostafa Asal.
En su palmarés, lucen cuatro títulos de campeón el mundo, algo solo conseguido por otros cuatro jugadores en la historia del squash, además de haber sido número uno del ‘ránking’ mundial durante 238 semanas, entre marzo de 2019 y marzo de 2025 -el quinto en la historia que más tiempo ha tenido la corona-, cuando fue superado por Asal.
«He logrado todos mis objetivos. Si miro atrás, he conseguido mucho más de lo que esperaba. Me voy en el momento justo. He vivido un sueño (…) El squash ha sido mi pasión, mi identidad y mi propósito, pero siempre hubo otra parte de mí: un hombre de familia. Me voy en el momento perfecto», señaló Farag en su despedida para remarcar que su atención estará ahora en las dos hijas que tiene con la jugadora egipcia Nour El Tayeb.
Desde su estreno en 2005 en el circuito de la Asociación Mundial de Squash (PSA, en sus siglas en inglés), el jugador cairota ganó 46 títulos, el sexto en la lista histórica.
El primer campeonato importante que conquistó fue el Abierto de Estados Unidos de 2017, en la misma edición en la que también se coronó en categoría su esposa, Nour El Tayeb, algo inédito.
En su despedida, el jugador egipcio tuvo palabras de solidaridad para el pueblo palestino, reclamó poner fin a la «injusticia» que sufre por la invasión israelí de su territorio y pidió «paz y dignidad».
Con la retirada de Farag, pasa a ser el número dos del mundo el peruano Diego Elías, quien ya lideró la clasificación durante unos meses en 2023, en puertas de que el próximo sábado comience el Abierto Británico, uno de los grand slam de la temporada. EFE