
El encarcelado líder del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), Abdulá Ocalan, ha hecho un llamamiento al lanzamiento de «un firme proceso de transición» en Turquía para reconocer «la realidad kurda en todas sus dimensiones», después de la histórica decisión del grupo de poner fin a su lucha armada e iniciar un proceso de desarme.
Ocalan ha realizado este llamamiento durante una reunión celebrada el lunes con una delegación del prokurdo Partido por la Igualdad y la Democracia Popular (DEM) que le visitó en la cárcel de la isla de Imrali en el marco de sus labores de mediación, un encuentro que la formación ha descrito como «muy positivo» y que duró unas tres horas.
El DEM ha explicado en un comunicado que el líder del PKK destacó durante la reunión que hay en marcha «un esfuerzo serio sobre un asunto histórico y bajo circunstancias limitadas». «Estamos luchando por impulsar una fase positiva, no una destructiva o negativa», sostuvo Ocalan, quien lleva más de un cuarto de siglas entre rejas en Imrali.
«La inclusión de la realidad kurda en todas sus dimensiones dentro del marco legal de Turquía y un firme proceso de transición deben ser la base para ello», ha dicho, antes de defender que «una transición a la legalidad como fenómeno holístico reforzará los pilares de una República Democrática».
«La oportunidad de integración democrática al borde de la que estamos es tanto local como universal. Para avanzar a una fase positiva, es vital que todo el mundo actúe con sensibilidad, seriedad y sentido de responsabilidad», ha argüido Ocalan, quien ha pedido «tomarse más en serio la historia y la sociología».
En este sentido, ha hecho hincapié en que «es importante reconocer que la relación turco-kurda ha sobrevivido hasta este día con pilares de dos milenios». «La unidad debe ser reforzada a través del reconocimiento, el entendimiento y la reparación de estos pilares. No debemos trazar líneas, sino establecer un horizonte que abarque los desafíos actuales», ha zanjado.
El PKK anunció en mayo su disolución y el fin de la lucha armada después de cuatro décadas de conflicto, tras un llamamiento de Ocalan en este sentido para abrir un proceso de negociaciones en el marco del cual el grupo inició la semana pasada la retirada de sus combatientes de territorio turco.
El Gobierno turco y el PKK ya iniciaron en 2013 un proceso de conversaciones de paz, si bien se derrumbaron en 2015 y se vieron seguidas por un estallido de enfrentamientos en las zonas de mayoría kurda en el sureste y el este del país.
Si bien el PKK formuló tras su fundación un llamamiento a la creación de un Estado independiente, en la actualidad aboga por una mayor autonomía en las zonas de mayoría kurda, parte de lo que se considera el Kurdistán histórico, que se extiende también a partes de Siria, Irak e Irán.
