El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó una acusación federal contra 33 presuntas personas vinculadas a una organización de tráfico de drogas en Filadelfia, luego de una redada coordinada el viernes 24 de octubre de 2025. La operación del FBI, calificada por las autoridades como la mayor del siglo en su distrito, se dirigió principalmente al barrio de Kensington, zona reconocida por la venta de estupefacientes y los altos índices de sobredosis. La iniciativa tuvo como objetivo la organización conocida como Weymouth Street Drug Trafficking Organization (DTO), presuntamente dedicada a la distribución de fentanilo, heroína, crack y cocaína.
Según datos oficiales del Departamento de Justicia y declaraciones de sus portavoces difundidas por Reuters y otros medios, la acusación incluyó 41 cargos relacionados con la distribución de sustancias controladas, porte ilegal de armas y delitos vinculados a peleas de animales. En el mismo operativo, el FBI informó sobre la detención de 24 de los acusados, mientras que otros ocho ya se encontraban bajo custodia y uno permanece prófugo.
El contexto de este caso coincide con la persistente crisis de opioides en Estados Unidos. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), las muertes por sobredosis de opioides disminuyeron de 110.037 en 2023 a 80.391 en 2024, aunque Filadelfia sigue siendo uno de los focos más importantes del país, reportando 1.310 muertes por sobredosis en 2023 y 1.045 en 2024, de acuerdo con el Departamento de Salud Pública de Filadelfia (PDPH). Kensington, epicentro histórico del tráfico de drogas en la ciudad, fue descrito públicamente por autoridades como “un mercado de drogas”.

¿Quiénes son las personas acusadas por narcotráfico en Filadelfia en 2025?
La acusación formal identifica a José Antonio Morales Nieves, alias “Flaco”, de 45 años, como presunto líder de la Weymouth Street DTO. Nieves habría autorizado la venta de drogas a cambio de pagos periódicos, según el comunicado emitido por el Departamento de Justicia. También figura como jefe operativo Ramón Román-Montánez, señalado como responsable de la logística y la organización de los turnos en la zona. Entre los acusados, que tienen entre 21 y 57 años, la mayoría reside en Filadelfia, con presencia de personas originarias de Nueva Jersey, Wilmington (Delaware) y Puerto Rico, conforme a los registros oficiales.

¿Cuál fue la operación del FBI contra la organización de Weymouth Street y cuántos cargos enfrentan?
La operación, denominada por el FBI como “Blockbuster”, se ejecutó el 24 de octubre con la participación del Departamento de Justicia, la Policía de Filadelfia y la DEA. Los involucrados enfrentan 41 cargos federales que incluyen distribución y posesión de fentanilo, heroína, crack y cocaína, porte de armas de fuego por parte de un delincuente y conspiración para organizar o participar en peleas de animales, de acuerdo con la acusación difundida por la Fiscalía del Distrito Este y reportes de Reuters.
El fiscal federal David Metcalf destacó que “se trata de la acusación federal más grande de este siglo en el distrito, dirigida directamente al núcleo de la crisis de opioides que afecta barrios como Kensington”.
¿Dónde operaba la red de tráfico de drogas desmantelada en Filadelfia?
La Weymouth Street DTO centraba su actividad en la cuadra 3100 de la calle Weymouth, situada en el barrio de Kensington, según documentación y mapas judiciales de la Fiscalía. El expediente describe la zona como “uno de los bloques de drogas más prolíficos de Filadelfia”. La policía local y la agencia antidrogas describieron puntos de venta fijos y organizados para operar durante casi una década.

¿Qué impacto tuvo la operación policial en la comunidad de Kensington?
De acuerdo con el Departamento de Salud Pública de Filadelfia y datos recabados por Reuters, Kensington ha sido durante varios años un núcleo de consumo y comercio de estupefacientes. En 2023, las autoridades de salud entregaron 100.000 dosis de naloxona, 180.000 tiras reactivas de fentanilo y casi 50.000 tiras reactivas de xilazina en el área, como parte de los esfuerzos para responder al incremento de sobredosis. Las acciones policiales se suman a estos mecanismos preventivos.
El agente especial del FBI en Filadelfia, Wayne Jacobs, señaló que “durante demasiado tiempo, la organización de Weymouth Street inundó Kensington de drogas y aterrorizó a los residentes”, de acuerdo con el comunicado oficial del FBI divulgado por AP News.
¿Qué dijeron las autoridades tras el desmantelamiento del grupo de tráfico de drogas?
El director del FBI, Kash Patel, declaró que “más de 30 personas han sido acusadas por su presunta participación en el narcotráfico y decenas de otros delitos… Utilizaron la violencia para imponer su territorio y vender drogas que contaminan las calles y la comunidad de nuestra ciudad”. El fiscal general adjunto Todd Blanche afirmó que “los narcotraficantes que envenenan nuestras comunidades enfrentarán todo el peso de la ley federal”, tal como difundió la Fiscalía y recogió Reuters. El comisionado Kevin J. Bethel, titular de la Policía de Filadelfia, añadió que el grupo usó la violencia “para proteger su negocio” tras introducir fentanilo en una comunidad ya afectada.

¿Cómo se relaciona este caso con la crisis de opioides en Estados Unidos?
El descenso de muertes por sobredosis en todo Estados Unidos y en Filadelfia refleja resultados de políticas combinadas de prevención y control, aunque la ciudad sigue registrando cifras superiores a la media nacional. Según los CDC, las muertes en 2024 bajaron a 80.391, comparadas con las 110.037 de 2023. La estrategia federal y local abarca desde intervenciones policiales hasta programas de reducción de daños como la distribución de naloxona.
Las acciones como esta operación son parte de la respuesta estatal a la “crisis de opioides”, término que resume el desafío sanitario y de seguridad pública vinculado al consumo ilícito de fentanilo y otros opiáceos.
¿Qué sigue después del operativo y la acusación federal en Filadelfia?
Las 33 personas acusadas enfrentarán juicio federal bajo cargos que pueden derivar en condenas elevadas. Las investigaciones continúan y permanecen bajo coordinación del FBI, la Fiscalía del Distrito Este de Pensilvania y otras agencias. Las autoridades reiteraron que mantendrán la vigilancia en Kensington y otros barrios afectados con el objetivo de reducir la circulación de drogas ilícitas y proteger a la población vulnerable.
El caso ilustra los desafíos continuos en la lucha contra el tráfico de drogas en ciudades densamente pobladas y cómo la colaboración interinstitucional busca limitar los efectos de la crisis nacional de opioides.
